Pesimismo ante el discurso del presidente norteamericano
EL PAÍS, La cotización del dólar, inició ayer la sesión europea a la baja y continuó cediendo en Estados Unidos. Parece ser que los operadores están deshaciendo sus posiciones en dólares de cara al discurso que ha de pronunciar el presidente Bush el jueves por la noche. Existe una actitud pesimista, ya que posiblemente el presidente no podrá ofrecer un plan que reduzca significativamente el déficit fiscal norteamericano.
Los más optimistas estiman que el plan de Bush contemplará un déficit de 98.000 millones, es decir, unos 6.000 millones por encima de lo presupuestado por el ex presidente Reagan.
La legislación GrammRudinan establece un máximo de 100.000 millones de déficit en el presupuesto de 1990. Sin embargo, los inversores dudan de que incluso se puedan alcanzar esos niveles.
Las ventas de dólares, moderadas en Tokio, donde su paridad quedó a 1,8680 marcos y 129,40 yenes, se aceleraron en Europa tras la publicación de la balanza comercial germana. El superávit comercial aumentó a 13.500 millones de marcos en diciembre frente a 13.100 millones el mes anterior, implicando la posibilidad de nuevas elevaciones en los tipos de interés.
El mercado de bonos, por su parte, tendió a la baja, perjudicado por la debilidad del dólar y por la última fase de la refinanciación del Tesoro, compuesta por subastas de bonos a 30 años por un monto de 9,500 millones de dólares. La rentabilidad ascendía, por tanto, hasta el 8,89% frente al 8,81 % del miércoles.
En este contexto, la Bolsa de Nueva York cedió 20 puntos al cierre. Las causas residen nó solo en la intranquilidad producida por el discurso de Bush sino también por los programas de venta por ordenador. No obstante, el volumen de operaciones fue moderado y la relación de valores al alza y a la baja resultaba poco desfavorable.
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