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Banesto obtuvo unos beneficios de 39.900 millones de pesetas tras dedicar a dotaciones otros 71.745

El Banco Español de Crédito (Banesto) cerró el pasado ejercicio con un resultado bruto de explotación de 63.360 millones de pesetas, mientras que los beneficios atípicos ascendieron a 26.190 millones de pesetas. Así, el resultado bruto se situó en 111.650 millones, que, tras dedicar 71.745 millones a dotaciones y amortizaciones, conforma un resultado contable de 39.900 millones. Cartera Central, mientras tanto, estudia qué decisión tomar a la luz del resultado del último consejo de administración de Banesto donde se aprobó el balance y la cuenta de resuItados.

Banesto, conforme a las cuentas enviadas el pasado día 20 al Banco de España, y que fueron expuestas a los consejeros de la entidad el pasado martes, mejoró su actividad bancaria en un 18,6% durante 1988, al obtener un resultado bruto de explotación de 63.360 millones de pesetas. La necesidad de aumentar sus dotaciones y amortizaciones hasta 71.745 millones, frente a 59.200 de 1987, sin embargo, activó el recurso a los atípicos (venta de acciones, inmuebles, etcétera), que ascendieron a 26.190 millones, con un aumento del 7,5% frente al ejercicio anterior. Todo ello configura un resultado contable de 39.900 millones, que viene a representar un incremento lilreramente superior al 32% respecto a 1987.Mario Conde, presidente de la entidad bancaria, resaltó el martes ante sus consejeros, según fuentes financieras, la mejora conseguida en el margen de intermediación, que se situó en 122.590 millones de pesetas, con uri incremento del 17,4% respecto al ejercicio anterior; el margen ordinario fue de 141.265 millones (+15%). Los productos firiancieros del ejercicio pasado ascendieron a 276.700 millones (+ 11%), mientras que los costes firiancieros se situaron en 154.188 millones (+6,5%), Otros productos ordinarios netos contabilizaron 18.670 millones y los gastos de explotación 77.900 milleines (+ 12%).

Durante el ejercicio de 1988, los recursos de clientes de Banesto se han incrementado en un 13,8%, al situarse en 2.239 miles de millones de pesetas, mientras que la inversión crediticia neta alcanzó los 1.418 miles de millones, con un aumento del 37,2% sobre 1987.

Tras votar en contra de esta cuenta de resultados, los cinco representantes de Cartera Central en el consejo de administración de Banesto estudian qué decisión tomar a la luz del resultado de la votación que tuvo lugar el martes. Según fuentes financieras, otros cinco consejeros se abstuvieron: Moisés Cosío, que dijo no haber estado presente en el consejo anterior del 30 de diciembre; Pablo Garnica, Jacobo Argüelles y Juan Herrera, que fijaron su postura en función de que el Banco de España no ponga obstáculos a la operación de venta de títulos de la cartera de Banesto a La Unión y El Fénix para formar un fondo de pensiones, y Juan Abelló, que era partidario de aplazar toda la discusión hasta abril.

Estos 10 consejeros no votaron a favor ni del balance, ni de la cuenta de resultados, aunque "la gestión de Mario Conde no se tocó, y sólo Alberto Cortina [representante de Cartera Central] empleó esa palabra una sola vez".

Presión al Banco de España

Ahora, los representantes de los Albertos aseguran que una de las alternativas posibles sería informar por escrito al Banco de España para que su punto de vista quedara claramente fijado ante la autoridad monetaria, aunque otras fuentes subrayan que desde el pasado día 20 el banco emisor tiene en su poder el balance y la cuenta de resultados.Mario Conde, según fuentes consultadas, puso de relieve la paulatina pérdida de cuota de mercado de la entidad, desde 1978, así como la escasa rentabilidad de la inversión crediticia de pasados ejercicios, casi dos puntos por debajo de los otros grandes, reflejo del alto índice de morosos y de insolvencias; junto a ello, una estructura de costes por debajo de la media de los demás bancos y una indiscutible solidez patrimonial. Según las mismas fuentes, Conde explicó que, cuando en el pasado mes de enero se produce la entrada del nuevo equipo de gestión, se intentó resolver los problemas más graves mediante el desarrollo de las actividades en banca corporativa, exterior y mercado de capitales, así como buscando una descentralización que permitiera agilizar la concesión de créditos y limitando riesgos.

Conde habría subrayado ante el consejo que, frente a unas necesidades patrimoniales de la entidad, estimadas en torno a los 30.000 millones de pesetas cuando accedió a la Presidencia, la realidad es que éstas han ascendido a 88.000 millones, incluyendo aquí las dotaciones a créditos fallidos, fndo de pensiones, etcétera, y las correspondientes al proceso de fusión emprendido con el Banco Central.

El consejo de Banesto transcurrió, según todas las fuentes consultadas, en medio de un ambiente "cordial en las formas, pero muy duro en cuanto al contenido de las intervenciones".

La Unión y El Fénix

Juan Abelló, en concreto, señaló ayer que, "el sentido de mi intervención fue proponer que se agotara el plazo estatutario para obtener información suplementaria que permitiera aprobar dicha cuenta de resultados por unanimidad". Juan Herrera, por su parte, reafirmó que "estaría de acuerdo con las cuentas presentadas por Marlo Conde si el Banco de España admite como correcta una operación de venta de activos del banco a La Unión y El Fénix".Esta operación, estructurada en agosto y formalizada en los meses siguientes, consiste en la venta a precios de mercado de títulos de renta fija y variable de la cartera de Banesto a La Unión y El Fénix para la constitución de un fondo de pensiones que afronte los pagos por complemento de pensiones de los trabajadores activos del banco, y bajo responsabilidad de la compañía aseguradora. "Si hay plusvalía, es para el fondo; si hay minusvalía, es para Banesto. No hay riesgo para los empleados", afirman fuentes de Banesto.

Los consejeros que se opusieron a la operación consideran que se trata de una venta dentro del grupo que no genera plusvalías reales sino simplemente contables. Pero los responsables de la gestión del Banesto argumentan que, al no consolidarse el balance de La Unión y El Fénix con el grupo Banesto, no puede considerase una operación dentro del grupo y que, por tanto, es perfectarnente legal.

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