Los clubes suspenden a Gil tres meses "por reiteración grosera"

El Comité Ejecutivo de la Liga Profesional decidió ayer suspender como asociado al presidente del Atlético de Madrid, Jesús Gil, durante tres meses "por reiteración grosera de insultos y descalificaciones a miembros de esta Liga y a la propia institución". Esta suspensión inhabilita a Jesús Gil para tomar parte en reuniones de presidentes o en asambleas de dicho organismo, si bien no está acompañada de sanción económica "ello en atención al club Atlético de Madrid", según reza el comunicado oficial de la Liga, que termina así: "El Comité Ejecutivo lamenta la adopción de este tipo de decisiones e insta a sus asociados a la continencia verbal". La respuesta de Gil fue inmediata: "Es como si me prohibieran ir a la verbena de La Paloma. Prefiero estar fuera y, desde luego, no me van a callar".Jesús Gil había criticado en estas últimas fechas a algunos dirigentes de la Liga profesional a raíz de la polémica suscitada por la retransmisión del partido Real Madrid-Atlético por las televisiones autonómicas. En algunas de estas declaraciones se había dirigido al presidente del Real Madrid -"se le han reblandecido las meninges"- y al del Athlétic de Bilbao -"se bebe hasta el agua de los floreros"- en términos poco adecuados. Los representantes del Barcelona, Gaspart, y Osasuna, Ezcurra, fueron quienes más hincapié hicieron en que se adoptara una decisión así. El debate duró breves minutos y la decisión se adoptó por unanimidad.

Magistratura

La magistrada de Trabajo de la sala número 7 de Madrid, Mari Luz García de Paredes, ha multado con 15.000 pesetas -la sanción máxima- al Atlético de Madrid por actuación temeraria notoria en la demanda de 25 millones de pesetas que presentó el pasado mes de julio contra su jugador Landáburu por "consciente mala preparación física". Esta demanda ha sido desestimada por esta magistrada, que no ha entrado a considerar si esa actuación supone un delito social del club, como solicitó el ahogado defensor del jugador, Fernando Pérez-Espinosa. Con esta sentencia son ya siete, entre despidos nulos y demandas, las que lleva perdidas el club madrileño en los dos últimos meses.