Indicios de que la explosión que mató al dueño de un restaurante de Barcelona fue accidental

La Guardia Civil está trabajando en dos posibles hipótesis para averiguar el motivo de la explosión que el pasado lunes por la noche acabó con la vida de Andreu Marcet Balcells, de 42 años, propietario de un restaurante en la localidad de Carme, a unos 80 kilómetros de Barcelona. Las primeras conjeturas que se realizaron tras el siniestro apuntaron la posibilidad de que Marcet hubiera sido víctima de un atentado terrorista. Dado que a la víctima no se le conocía ningún tipo de actividad política y que no había recibido nunca amenazas, la Guardia Civil ha declinado pronunciarse por el momento.La otra hipótesis, apuntada por los empleados de la empresa en la que trabajaba Marcet por las tardes, la fábrica textil Brilen, SA, situada en Odena (Barcelona), es que la explosión pudo producirse porque el fallecido transportaba esporádicamente explosivos a una cantera situada a unos dos kilómetros de su casa, en Carme. La Guardia Civil se trasladó a la cantera, donde los empleados aseguraron que los explosivos que allí se utilizan son siempre custodiados durante el traslado por guardias civiles.

Los explosivos con los que suelen trabajar los empleados de la obra son Goma-2 y Riogel. Precisamente, las primeras investigaciones realizadas sobre el siniestro sugieren que el artefacto estaba fabricado con unos cinco o siete kilos de alguna sustancia explosiva que podría ser Goma-2, Amonal o TNT. Estos materiales se desintegran por el efecto de la explosión, lo que hace difíciles los trabajos para recoger muestras del artefacto. Sin embargo, la Guardia Civil ya ha enviado unas muestras a Madrid para que sean analizadas.

El explosivo estaba situado, según los agentes que custodiaban la zona, debajo del asiento del conductor. Este hecho provocó que el cuerpo de Marcet se desintegrara en múltiples fragmentos y que el coche quedara partido en tres partes.

Tanto los compañeros de trabajo como los vecinos afirmaron ayer sentirse desconcertados ante la posibilidad de que Marcet hubiera sido víctima de un atentado terrorista. La confusión que ayer se vivía en la zona se vio acrecentada ante el hecho de que, menos la Guardia Civil, la mayor parte de las personalidades locales formularan hipótesis contradictorias. El alcalde de Igualada, Manuel Miserachs, de CiU, aseguró a una emisora de radio que el atentado es obra de ETA. A preguntas del periodista sobre que motivos le hacían formular tal acusación, Miserachs respondió: "Porque la explosión fue muy fuerte".

El funeral de Andreu Marcet se celebrará hoy en la iglesia parroquial de Carme.