El dinero se cansa pronto
El mercado de valores ha decidido concederse un descanso en la actividad inversora, al menos en los referente al apartado de las compras, y en la sesión de ayer se desinfló en parte el globo de las plusvalías. No es fácil que los inversores hayan encontrado respuesta al interrogarse sobre la procedencia del papel, pero sí que han decidido esperar al ver que seguían saliendo títulos al mercado en cada ocasión en que el dinero decidía tantear el terreno. Pocas realizaciones de plusvalías se dieron ayer, ya que la mayoría de los valores registraron bajas -casi siempre de poca importancia- que han vuelto a tomar por sorpresa a una buena parte del mercado.La cresta de la ola se produjo el pasado lunes, incluso para muchos valores bancarios, aunque alguno efectuó un esfuerzo adicional y mejoró nuevamente su situación, con lo que de momento continúa a la cabeza del sector. El esfuerzo significó un volumen negociado de más de 120,000 títulos, con lo que da la sensación de que la pugna no ha terminado dentro de este grupo si las entidades están dispuestas a hacer valer su fuerza.
Los grupos más afectados fueron los industriales, siempre más dispuestos a dejarse llevar por los movimientos del mercado. Junto a ellos se sitúa un grupo eléctrico que sin generar plusvalías entra en el terreno de las bajas. También Telefónica acusa los movimientos del mercado, pero no del español, lo que ha contribuído a debilitar la corriente alcista, a pesar de esos 15.000 millones de pesetas efectivas que se negociaron el lunes.
Al cierre se imponía la incertidumbre ante la insistencia de algunos vendedores en ser los primeros.
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