La ley de Costas

No acierto a entender cómo siempre que se atenta desde otras instituciones contra los intereses extraparlamentarios de la coalición conservadora que gobierna actualmente la Generalitat salta como un resorte la eterna cantinela de la invasión de competencias y el factor de involución autonómica. Ya no cuela.Y para la ciudadanía catalana cuela mucho menos la polémica actualmente puesta en marcha por el aparato convergente, de la ley de Costas. El ciudadano no lo entiende y a la vez sospecha. No entiende cómo se puede oponer a una ley que pretende proteger nuestro litoral de los desmanes especulativos con el simple argumento político de la invasión de competencias. Y sospecha que dentro y detrás de Convergència i Unió se esconden determinados grupos de presión con intereses especulativos. Uno no puede entender cómo Minoría Catalana estuvo denodadamente intentando en el Congreso de los Diputados suavizar la ley en sus aspectos proteccionistas- y ahora, aquí en Cataltunya, se oponen a la ley con la falacia del involucionismo autonómico. El MOPU quiere un vigilante por cada 20 kilómetros de litoral. Yo, como ciudadano catalán amante de la naturaleza, exijo, si fuera necesario, muchos más, dada la triste actitud adoptada por quienes gobiernan la Generalitat.-