_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

El mal de las ausencias

Aún faltan diez días para la publicación de la tasa de inflación de agosto; para entretener la espera de la noticia han comenzado, a circular rumores que colocan el crecimiento de precios ese mes por encima del medio punto. La discusión sobre la importancia del dato y sobre si estará o no descontado cuando se publique ocupó bastante más tiempo que la contratación de valores. En muchos corros resultó difícil llegar a un cambio de referencia por la inhibición de ambas partes del mercado.Nadie quiere que bajen mucho los precios, a nadie le interesa perder el 20% de revalorización que acumula el índice desde principio de año; pero los compradores se han retirado para comprar más barato y los vendedores temen que cualquier mínima presión del papel recorte elemasiado unos cambios que ya deberían ser atractivos. Con muy poco dinero es posible frenar la caída. Y eso, precisamente, ocurrió ayer valor tras valor en prácticamente todos los corros. El freno lo puso el dinero, muy poco, pero el dinero, como muestra de que tampoco está interesado en romper un soporte tras otro.

La espera, y el nerviosismo que suele acompañarla, pueden erosionar tanto el ambiente como una cifra de inflación que se aleje sin solución de las previsiones del Gobierno. Para limitar ese efecto psicológico, el mercado ya trabaja con una expectativa de inflación importante, que algunos sitúan cerca del 1% en agosto. Este mecanismo, cuando concluye con el acuerdo general de que la noticia ya estaba descontada, podría ayudar a definir un nuevo punto cero. De momento, está reestructurando la demanda de todos los instrumentos financieros hacia el corto plazo, y cuanto más corto, mejor.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_