Un joven se fuga tras matar a un guardia civil de Tráfico y herir a otro

AGENCIAS El guardia civil de tráfico Juan José Alcázar Pliego, de 26 años, resultó muerto en la madrugada de ayer por los disparos de un automovilista que hirió gravemente a su compañero, Juan Antonio García Benito, y después se dio a la fuga. El hecho ocurrió a la altura del kilómetro 177 de la Nacional II, Madrid-Barcelona, en las cercanías de Arcos de Jalón (Soria).

El herido fue internado en la Residencia de la Seguridad Social de Soria. A la hora del cierre de esta edición, fuerzas de la Guardia Civil de Soria y zonas limítrofes, en número cercano al millar de efectivos, así como un helicóptero de las Fuerzas de Seguridad del Estado, participaban en la localización del joven homicida.La patrulla de la Guardia Civil de Tráfico afectada se disponía a identificar, hacia las cuatro de la madrugada de ayer, al joven ocupante de un vehículo Seat Ronda M-1923-FY, ya que había observado alguna irregularidad en la conducción del mismo. Al acercarse, el joven hizo varios disparos contra los agentes y después se escapó por el monte, en dirección a la localidad de Montuenga. Según afirmó el gobernador civil de Soria, Ángel Monfórt, el agresor aparenta unos 20 años y vestía una camisa de manga corta y un pantalón vaquero.Los disparos acabaron con la vida del guardia Juan José Alcázar Pliego, de 26 años de edad y natural de Villahermosa (Ciudad Real). Alcázar, casado y sin hijos, estaba destinado desde abril en el destacamento de Arcos de Jalón (Soria), adonde llegó desde Monreal del Campo (Teruel). La capilla ardiente con sus restos fue instalada ayer en el Ayuntamiento de la localidad de Arcos de Jalón.

Calibre 38

El agente herido, Juan Antonio García Benito, de 27 años, fue operado en la residencia de la Seguridad Social de Soria desde las ocho hasta las 11 de la mañana. Tras la intervención, el director en funciones de ésta, Juan Carlos Sanz Lacruz, dijo que su estado era "muy grave", por lo que está ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), aunque no se temía por su vida. Las heridas le afectaron al hígado y a los riñones. García Benito es de La Victoria (Córdoba), está casado y tiene dos hijos pequeños. Hasta 1985 estuvo destinado en Guipúzcoa.Al parecer, los disparos fueron efectuados con una pistola del calibre 38, lo que, en principio, induce a descartar la hipótesis de que se trate de un atentado terrorista, según ha manifestado un portavoz de la Dirección de la Guardia Civil, quien afirmó también que según todos los indicios se trataría de un delincuente común.Según la misma fuente, fuerzas de la Comandancia de Soria y provincias limítrofes, y helicópteros de la Guardia Civil, apoyados por personal y perros especializados se encontraban ayer rastreando la zona en busca del agresor. El herido continuaba en estado muy grave a última hora de la tarde de ayer.

Funerales

El director general de la Guradia Civil, Luis Roldán, presidío ayer por la tarde en Arcos de Jalón el funeral por el fallecido. El féretro con los restos mortales de Juan José Alcázar Pliego fue trasladado desde el Ayuntamiento, donde se había instalado la capilla ardiente, hasta la parroquia de la Asunción, acompañado por compañeros del fallecido, que portaban nueve coronas.La ceremonia, a la que asistieron la viuda y los hermanos del guardia civil fallecido, fue oficiada por el obispo de la diócesis de Osma-Soria, Braulio Rodríguez Plaza, que pronció palabras de aliento hacia la familia del fallecido. "Si no existe ningún derecho a que nadie muera vilmente asesinado, menos en el caso de un agente del orden, de una persona que se dedica a que haya paz", señaló el obispo de Osma-Soria.Numerosas personas llenaban por completo el interior de la iglesia, mientras otras, que no pudieron acceder al templo, se congregaron en la plaza y calles adyacentes.Entre las autoridades que asistieron al funeral se encontraban también el delegado del Gobierno en Castilla y León, Domingo Ferreiro, y el gobernador civil de Soria, Ángel Monfort Escorihuela.Tras la finalización del funeral, el féretro fue conducido por carretera a la localidad valenciana de Benifairo de les Valls, donde el guardia civil será enterrado hoy.