Un musulmán preso tras confundirle con otra persona de igual nombre

El musulmán Abdelmalik Mohamed Mohamed, de 25 años, se encuentra encarcelado en la prisión de Melilla desde el pasado día 16 por orden del juez José María Treviño, después de haber sido confundido con otro musulmán del mismo nombre y apellidos residente en Ceuta y que tenía antecedentes penales, según informan personas próximas al afectado. El joven melillense fue condenado a una pena de cuatro meses. Al ser una condena inferior al año, hubiera sido puesto en libertad al no tener antecedentes penales -práctica habitual judicial-, pero finalmente fue encarcelado al confundirle con el joven ceutí.El proceso se inició en una jornada de 1982, cuando unos policías de Melilla detuvieron a Abdelmalik por no portar documentación personal y fue conducido a comisaría. Seis años más tarde, recibió una citación judicial, acusado de insultar a los agentes. El joven acudió al juzgado el pasado junio, pero llegó tarde y el juicio ya había concluido. Posteriormente, se le comunicó que había sido condenado a cuatro meses de prisión.

En el juzgado de Melilla, y a través de la Dirección de Registro General de Penados y Rebeldes, se intentó saber si el condenado tenía antecedentes penales y se comprobó que una persona con esos mismos nombre y apellidos figuraba en cuatro procesos judiciales, por lo que el fiscal, José Luis García del Valle, se opuso a que el joven fuese liberado. Advertida del error, la madre del condenado viajó a Ceuta y logró que en el juzgado de esta ciudad le diera el pasado día 20 un documento en el que se especifica que el preso en Melilla y el joven con antecendentes penales son dos personas diferentes.

Familiares y amigos del joven se entrevistaron con el fiscal y éste con el juez Treviño. Según personas próximas al perjudicado, Treviño ha respondido que la sentencia es firme y que, además, el juez puede disponer el ingreso de un condenado en prision aunque la pena sea inferior a un año y el perjudicado no tenga antecedentes penales, pese a que no es la práctica habitual.

El letrado José Luis Aragón, que no defendió al joven, pero gestiona su libertad condicional, comentó ayer que está dispuesto a comunicar el caso al Consejo General del Poder Judicial.