Cuatro muertos y cinco heridos en la celebración de la Clásica Ciclista de San Sebastián

Cuatro personas resultaron muertas, una de ellas un rimo, y cinco heridas, dos también niños, en un accidente ocurrido durante la celebración de la Clásica de San Sebastián. Un motorista, que actuaba de enlace en la carrera, salió despedido hacia los espectadores en un intento de evitar, sin lograrlo, la colisión contra un coche que irrumpió, inesperadamente, en la carretera por donde poco después iban a pasar los participantes. Otro motorista de la carrera también resultó accidentado. El percance se produjo en la carretera nacional 534, a su paso por Zumaya (Guipúzcoa). Hay versiones contradictorias sobre la presencia de un agente en el cruce por donde salió el coche.

Las personas fallecidas son Fernando Costa, piloto de la moto; Manuela López, de 73 años; Juan Blas, de 67, y Mikel Garciarean, de siete, que se encontraban a la espera del paso de los corredores. Los tres primeros fallecieron en los primeros instantes del accidente. Mikel Garciarean murió horas más tarde en la unidad de vigilancia intensiva del servicio de pediatría de la residencia de la Seguridad Social de San Sebastián.Se encuentra en estado muy grave Jon Ochoa, el otro motorista implicado en el accidente, con lesiones en la cabeza y posible fractura de la base del cráneo, que horas después del accidente continuaba sin conocimiento. Los otros dos niños que resultaron arrollados, Nerea Uriarte, de seis años, y Mikel Olaizola, de cinco, se encuentran internados en estado "menos grave salvo complicaciones", según el parte médico facilitado. Los otros accidentados son Pablo Ramos y Juan Hernández, que también fueron internados en San Sebastián.

El accidente, según testigos presenciales, se produjo cuando un Seat 127, matrícula SS-6856-D), salió a la carretera después de que hubiera pasado un ciclista escapado, y el público aguardara la llegada de' resto de los participantes que le seguían a varios minutos de diferencia. Las dos motos oficiales de la carrera intentaron esquivarle y mientras Fernando Costa chocó contra él, Jon Ochoa pudo esquivarle, pero las dos máquinas se precipitaron contra el numerosísimo público que permanecía a ambos lados de la carretera en el centro de Zumaya para presenciar la prueba.

Versiones contradictorias

No está totalmente aclarado si en el cruce por donde apareció el coche había un guardia municipal que regulase el paso de los vehículos. En lo que sí coinciden todas las versiones de quienes presenciaron el accidente es en que "de pronto un coche salió a la calzada, la moto trató de esquivarle y se fue contra el público".

Organizaciones deportivas del Diario Vasco, bajo cuya responsabilidad se celebraba la carrera, facilitó el siguiente comunicado oficial: "Un vehículo ajeno a la prueba efectuó una maniobra que obligó a los motoristas de enlace de la organización a realizar un brusco movimiento, produciendo el accidente".

El accidente se produjo sobre la una y media del mediodía, 90 minutos después de la carrera hubiera comenzado en San Sebastián. Pese a que desde el primer momento se comprobó la gravedad de los hechos, la prueba, en la que participaban unos 200 corredores, no se suspendió Cuando éstos pasaron por el lugar del accidente pudieron contemplar las víctimas que ya habían sido cubiertas con mantas.

Los motoristas que actuaban de enlace tenían como misión adelantarse a la carrera para señalar a los participantes, con unas banderas, los pasos en los que había que extremar la precaución. Esta es una elemental medida de seguridad que adoptan las organizaciones de las carreras en favor de los participantes.

En este tipo de medidas, el Tour es modelo a seguir, ya que sitúa un policía en cada cruce al paso por las ciudades y los pueblos, además de que el paso de vehículos no resulta posible al estar cerradas las calles con vallas También coloca agentes en cada carretera, e incluso camino, que van a dar a donde se celebra la carrera.