Carré, Orban & Partners abre oficinas en Madrid y Barcelona

La consultora Carré, Orban & Partners (COP) se ha instalado en España mediante la apertura de sendas oficinas en Madrid y Barcelona. COP está considerada como la segunda firma europea del sector, con una facturación a nivel de grupo de 20.000 millones de pesetas en 1987. Además de estas dos nuevas oficinas, la multinacional consultora posee representaciones en Londres, Amsterdam, Bruselas, Düsseldorf, Roma, Milán, Génova, Nueva York, París y Zúrich.El 50% de la facturación de Carré procede de su división de cazatalentos (executive search), y el resto, de la auditoría de equipos directivos (management appraisals) y de su aseoría en procesos de fusiones y adquisiciones de empresas.

COP Ibérica cuenta con una decena de colaboradores a las órdenes de Carlos Cifuentes, que es consejero delegado de la filial española y responsable de la oficina de Madrid. La delegación barcelonesa está dirigida por Luis Conde.

Luis Conde justifica la instalación en España de Carré, Orban & Partners por "la necesidad de los empresarios españoles de dimensionar sus empresas adecuadamente ante el nuevo entorno comunitario europeo". En su opinión, "las pequeñas y medianas empresas, a pesar de disfrutar de una serie de ventajas, adolecen de una serie de incovenientes derivados de su tamaño. Generalmente tienen una débil estructura financiera que les impide acometer proyectos importantes de inversión, carecen de economías de escala y su gerencia no está profesionalizada".

"Es de esperar", prosigue Conde, "que, al igual que ha ocurrido en otros países, se produzca en España un proceso de concentración de empresas, dando como resultado una más adecuada dimensión media de la empresa española.

No es éste el único motivo que ha inducido a los directivos de Carré a instalarse en España. Luis Conde señala otros cuatro: "La acción gubernamental encaminada a privatizar sociedades del sector público; la iniciativa legislativa que provee nuevos agentes inversores -fondos de pensiones, sociedades de capital-riesgo, etcétera- y proyecta reformas sustantivas en el mercado de valores; el ensanchamiento y modernización del mercado bursátil, y, por último, el interés creciente del inversionista exterior en el mercado español".