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EL TOUR, PENDIENTE DEL CONTRAANÁLISIS

Delgado: "Ganar ya no es sólo responsabilidad mía"

Pedro Delgado, tras la visita del secretario de Estado para el Deporte, Javier Gómez-Navarro; de Herminio Menéndez, asesor del Consejo Superior de Deportes (CSD), y de la doctora Cecilia Rodríguez, directora del laboratorio antidoping del CSD, reconoció anoche a EL PAÍS que su optimismo había subido muchos enteros: "Ayer, porque estaba rabioso, quería ir a por todas en la etapa. Incluso no descartaba ganar hoy en el Puy de Dôme. Ahora, porque estoy confiado, tengo que reservarme. Mi meta ya no es ganar en el Puy de Dôme. Vuelve a ser llegar de amarillo a París, ya que confío en la inmediata aclaración del asunto". El corredor admitió estar asustado ante las dimensiones que había adquirido su caso: "Antes, ganar el Tour era responsabilidad mía. Ahora me siento abrumado, porque hay mucha gente que ha apostado por mí".

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El Puy de Dóme.

A las doce de la mañana de ayer, poco antes de la salida de la etapa, Delgado realizó sus primeras declaraciones, concedidas a Pedro González, de Radio Nacional: "Los productos que llevo en este Tour son los mismos que el año pasado. Si entonces no di ningún positivo, no tenía por qué darlo ahora. Pero hay que esperar al contraanálisis".La jornada de Delgado comenzó con la mala noticia de la oficialidad, en un comunicado escrito, del positivo en el control antidoping de la 13ª etapa. Cuando se le preguntó si se había fijado en el comunicado, dijo: "Sé que me ha llegado la comunicación porque he firmado unos papeles para pedir el contraanálisis". Delgado, sin embargo, reconoció que ya había empezado a hacerse a la idea de que el problema era realmente serio: "A pesar de que el martes dudaba mucho más, ahora ya dudo menos de que no sea positivo. Pero todavía espero que todo sea una confusión. Por eso he pedido el contraanálisis, para intentar que todo se aclare de una vez". "Ya me he hecho a la idea de que he dado positivo, pero todavía no sé con qué. Aunque venía en el papel, no me he fijado siquiera en qué etapa era", añadió. "Pero yo sigo estando muy tranquilo y limpio. Mi maillot de líder no se debe a la ayuda de productos prohibidos ni nada de eso. Estoy tranquilo y molesto, pero, si resulto positivo, me va a chocar mucho porque es una cosa rarísima que no me esperaba. Los productos que he estado llevando en este Tour son los mismos que el año pasado. Si entonces no di ningún positivo, no tenía por qué darlo ahora"Productos

Cuando, se le preguntó a Delgado si conocía los rumores que hablaban de un producto que enmascaraba los anabolizantes, dijo: "Eso es lo que me han comentado. ¿Y qué quiere que le diga? Hay tantos productos que dicen que es para tapar anabolizantes o para una cosa u otra que no me atrevo a dar una opinión fija de que sea así. Yo desearía saber primero qué producto ha sido, y luego, si ese producto es positivo, porque parece ser que no está prohibido por la UCI (Unión Ciclista Internacional) y sí por el COI (Comité Olímpico Internacional). Nosotros nos regimos por la UCI, que es la que controla todos los productos que tomamos o dejamos de tomar, pues sabemos que hay que ir de acuerdo a eso".

Rodeado de su padre y de su compañero de equipo Dorninique Arnaud y con el maillot de líder entre las rodillas, Delgado parecía tranquilo, pero en su cara se podía entrever un gesto de seria preocupación. Sin embargo, Delgado estaba convencido de su decisión de seguir en el Tour. Y, comparando con el año pasado, cuando perdió ante el irlandés Stephen Roche por apenas unos segundos, reconoció que la experiencia actual era más dura: "Sí, es mucho más duro que el año pasado porque entonces se perdió en buena lid. Este año, si se pierde en estas circunstancias, va a ser doloroso".

"He dormido bien porque estaba cansado de tanta tensión de todos estos últimos días, pero me he despertado bastante temprano y estoy nervioso", dijo Delgado, "porque, con todas estas cosas, puede ser que le quiten a uno un Tour que se lo tenía bien merecido y ganado"

"yo confío en que se aclaren un poco las circunstancias. Hay un análisis mío de todos los días y ahí se puede observar si hay una cosa extraña. Yo estoy con la conciencia tranquila, pero hay que esperar un poco".

La frustración de Delgado, que ya ha vivido varias experiencias negativas en el Tour -una caída, la muerte de su madre y ahora la polémica sobre el positivo en el control antidoping- se reflejaba en sus palabras: "Cuesta mucho trabajo prepararse y llegar hasta aquí. Todos los años puedes estar muy bien y a última hora puede surgir cualquier cosa. Este año me era todo muy favorable y por ello iba tranquilo y confiado en que ya se había hecho todo lo más difícil. Ya sólo pensaba y soñaba con ese París que estaba muy cerquita. Perderlo a unos pocos días del final y de esta manera me resultaría muy doloroso".

Presiones y futuro

Delgado no desmintió que hubiese recibido presiones para abadonar el Tour por parte de los organizadores, pero aseguró que pensaba llegar hasta el final de esta historia.

"Lo que está bien claro", dijo, "es que el Tour no se puede ganar todos los años. Hay corredores que tienen muchos problemas para ganar uno, y otros para ganarlo dos o tres veces, y otros que en toda su vida no lo ganan nunca. Por eso, si yo no tuviese ahora la conciencia tranquila, seguramente hubiera adoptado la postura del abandono, pero yo quiero seguir adelante porque sigo confiando en que ha existido un error. Y por eso no tengo que aceptar sugerencias de ningún tipo".

Respecto al futuro, en caso de que todos los aspectos nega tivos se confirmen, Delgado dijo: "Esto será un palo grande, pero es como todo y el tiempo todo lo cura. Y la ilusión que voy a tener con el Tour va a ser la misma el año que viene. Y, bueno, estas cosas te enseñan, y te hacen tener un punto de vista respecto a algunas cosas para cuidarte un poco mejor y evitar circunstancias de este tipo porque no son ni bien de seadas ni bien queridas". Por la noche, como confesaba en sus declaraciories a EL PAÍS, sus perspectivas habían cambiado.

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