Amparo Bisquert

Dirigió algunas de las galerías de arte, públicas y privadas, más importantes de Valencia y montó exposiciones que atrajeron la atención de miles de visitantes. Pero Amparo Bisquert, una valenciana de Denia de 43 años, se cansó un día de ver el arte desde la barrera y decidió lanzarse al ruedo. Ha realizado una exposición de diseño de joyas en Madrid y prepara otra en Valencia. "Mi etapa anterior me ha servido mucho para el trabajo creativo, pero considero cerrado el capítulo de dirección de galerías", señala.Cuando hace un par de años presentó unos diseños a un premio de la Generalitat valenciana, varios amigos llamaron, a Amparo Bisquert para comentarle que había una diseñadora que se llamaba como ella. Ahora esta mujer, que esconde tras una expresión dulce y relajada una enorme capacidad de trabajoy una notable firmeza de convicciones, cuenta la anécdota para revelar las dificultades que encuentra para abrirse un hueco en el mundo de la creación artística después de haber conseguido un puesto preferente en la dirección de galerías.

Quizá las aficiones de Amparo Bisquert nacieron en el ambiente de la fábrica familiar dedicada al diseño y a la producción de juguetes. Se considera de algún modo autodidacta, a pesar de haber realizado estudios artísticos en su juventud. No obstante, su fascinación por el arte surgió a partir de su trabajo con el pintor Joaquín Michavila. "Creí", comenta, "que era mucho más enriquecedor colaborar con Michavila que cursar estudios de pintura".

Tras aquella etapa, Bisquert dirigió durante los años de la transición la galería Temps, que, según sus palabras, "marcó la pauta de la renovación artística y cultural en Valencia". En aquella sala hicieron sus primeras armas artísticas nombres hoy consagrados, como Miquel Navarro, Carmen Calvo o Joan Antoni Toledo, y expusieron artistas de la talla del Equipo Crónica y Jordi Teixidor. Temps sirvió también como centro de reunión de otras gentes de la cultura, como el sociólogo Josep-Vicent Marqués y el actual alcalde de Valencia, Ricard Pérez Casado.

Con otros criterios, Bisquert se puso al frente de la sala de exposiciones del Ayuntamiento, que dirigió durante seis años. "Traté", comenta, "de combinar un enfoque universalista con la promoción de los artistas valencianos. En cualquier caso, primaron los criterios didácticos desde la voluntad de que la ciudad no se mirara el ombligo en materia artística y de que los valencianos no tuvieran que desplazarse a Madrid o Barcelona para admirar buenas exposiciones. Desgraciadamente, los valencianos que se dedican a profesiones creativas continúan teniendo más proyección fuera de Valencia".

Tras un paso fugaz por galerías de prestigio, como la de Luis Adelantado, se lanza a fondo al diseño. "Dirigir galerías es un trabajo que absorbe mucho", dice, "y yo era incapaz de compaginar mi actividad con un trabajo propio de creación. Siempre he dibujado y diseñado, pero de puertas adentro".

Ha realizado diseño de ropa, pero finalmente se ha decantado por las joyas en versiones para hombre y mujer. "Me gusta controlar todo el proceso de producción, y por esa razón me siento más a gusto en el trabajo con joyas", señala.