El Reino Unido tomará medidas contra el vandalismo de sus turistas en España

Las autoridades británicas preparan una campaña dirigida a los turistas de su país que visiten España con el objeto de prevenir las actuaciones vandálicas de algunos de ellos. Unos folletos con recomendaciones de comportamiento y anuncios en la televisión británica son las iniciativas anunciadas ayer en Benidorm (Alicante) por el subsecretario de Estado del Foreign Offlice, Timothy Eggar quien se entrevistó con autoridades locales y responsables policiales.

Eggar defendió ante los empresarios de los tour operators, que organizan las vacaciones de la mayor parte del millón de británicos que visitan Benidorm. cada año, la conveniencia de repartirles, nada más llegar a España, unos folletos con recomendaciones sobre su comportamiento.La experiencia, con carácter piloto, se está realizando ya en Ibiza. "Es la primera vez", dijo Eggar, "que los operadores turísticos reconocen el problema y se deciden a tomar cartas en el asunto'.

Una parte del turismo británico -que constituye la mayoría del volumen de visitantes extranjeros que recibe Benidorm- se caracteriza, según fuentes policiales, por una tendencia a la violencia, originada, fundamentalmente, por el excesivo consumo de bebidas alcohólicas. A pesar de ello, Timothy Eggar destacó que, según las autoridades municipales de Benidorm, "los británicos no se comportan mejor ni peor que los turistas de otras nacionalidades". Según el diplomático británico, esta opinión es compartida por las autoridades de Baleares, mientras las de Málaga consideran que los británicos ocasionan más actos vandálicos que otros turistas.

"Somos el único país", precisó Eggar, "que está adoptando iniciativas específicas para mejorar el comportamiento de sus turistas". El diplomático recorrió durante la noche del domingo las calles de Benidorm. para estudiar sobre el terreno la situación. Cuatro ciudadanos británicos fueron detenidos ésa misma noche por agredir a miembros de la policía local. Eggar visitó a los detenidos ayer, tras entrevistarse con el jefe de la comisaría de Benidorm. "Es muy importante la colaboración de las autoridades municipales", apuntó.

Sin incluir a aquellas personas que han protagonizado escándalos o alteraciones del orden público -muy numerosas, según la policía-, 63 británicos han sido detenidos durante 1988 en Benidorm por presuntos delitos contra la honestidad, robos, hurtos o daños. Esta cifra, que representa más de la mitad del total de extranjeros detenidos, duplica la del año pasado.