La junta de FECSA aprueba un aumento de capital hasta 207.000 millones

La junta general ordinaria y extraordinaria de FECSA celebrada ayer en Barcelona aprobó, como estaba previsto, la ampliación de capital de los 181.957 millones de pesetas actuales hasta un total de 207.000 millones de pesetas. La junta aprobó también otros requerimientos de sus actuales directivos, que recibieron el aplauso y la confianza de los accionistas después de la gestión realizada en el último año y de las perspectivas de saneamiento a largo plazo de la compañía.

Rafael Suñol, presidente del Banco de Crédito Industrial, y Alfonso Botín, en representación del Banco Santander, fueron confirmados en sus cargos de consejeros.

La reestructuración del consejo de administración en función de los nuevos accionistas, la situación de las filiales mineras, la fecha en la que podrá reanudarse el reparto de dividendo y la situación del retorno a la cotización bursátil, fueron las principales preocupaciones expresadas por los accionistas en su turno de ruegos y preguntas. Luis Magaña se vio obligado a decir que no pensaba en un abandono próximo de su responsabilidad como presidente de la compañía, ni siquiera para después de que haya conseguido el acuerdo con los acreedores, y que sólo renunciaría a su cargo a requerimiento de los accionistas, lo que le valió el aplauso más generoso de la sesión.

El presidente de FECSA, en una intervención inicial de hora y media de duración, explicó la situación de la compañía tras el acuerdo casi definitivo con los acreedores y las ventajas producidas por la implantación del nuevo marco estable del sector eléctrico. Magaña dio las gracias por su comprensión a las distintas administraciones, a los responsables del sector, y a las más de 400 instituciones financieras con las que ha negociado el plan de viabilidad.