Justicia iniciará en octubre la construcción de tres cárceles, pese a la resistencia de los ayuntanmientos

El Ministerio de Justicia iniciará en octubre la construcción de tres nuevas cárceles en la región, con un presupuesto global de unos 7.000 millones, a pesar de las resistencias puestas por los ayuntamientos. Soto del Real, con alcalde del CDS, encabeza la protesta y prepara acciones contra la instalación de la nueva cárcel de mujeres en su término municipal. La decisión de Justicia ha provocado también enfrentamientos internos en los ayuntamientos de Navalcarnero y Valdemoro, ambos de mayoría socialista.

Los proyectos de Soto del Real y de Valdemoro están prácticamente acabados, a falta únicamente de la ocupación de los terrenos expropiados y de la adjudicación de las obras. La prisión de Navalcarnero comenzará a construirse también a finales de año. Queda aún por decidir la ubicación de una cuarta cárcel en régimen abierto, con capacidad para 100 reclusos, que se instalará probablemente junto a la de Navalcarnero. Las tres primeras obras estarán acabadas en poco más de dos años.La directora de Servicios del Ministerio de Justicia, María Teresa Fernández de la Vega, niega las acusaciones de falta de diálogo con los ayuntamientos. "Las conversaciones con la Comunidad de Madrid y con los municipios afectados se iniciaron hace más de un año", señala.

La nueva cárcel de mujeres de Soto del Real, que sustituirá a la de Yeserías, ha provocado una oleada de protestas en el pequeño municipio serrano en los últimos meses. La prisión, con capacidad para 350 internas, estará situada en unos terrenos colindantes con el parque regional del Manzanares, a menos de 40 kilómetros de Madrid.

El polémico proyecto de Justicia, unido a la negativa de la Comunidad a dar el visto bueno a cinco planes parciales de la localidad, ha influido en la ruptura del pacto municipal entre el CDS y el PSOE. Los socialistas han pasado a la oposición y han anunciado una moción de censura junto a AP contra el actual alcalde, el centrista Domingo Eladio Navarro.

'Golpes bajos'

Los argumentos municipales contra el penal son "el grave impacto ambiental" y el temor a un frenazo en el desarrollo turístico de la zona (la población de 2.000 habitantes se multiplica por 10 durante los fines de semana).Según el concejal de Urbanismo, Javier Ruiz Paredes, el Ayuntamiento de Soto "está recibiendo numerosos golpes bajos porque resulta molesto". El último golpe ha sido la negativa del Ministerio para las Administraciones Públicas a autorizar la celebración en el pueblo de un referéndum sobre la instalación del penal por considerar que no es asunto de su competencia. Algo parecido ha ocurrido en la Asamblea de Madrid, que ha pedido inútilmente en dos ocasiones la revisión del proyecto, con los votos de AP y CDS. La respuesta del Gobierno regiorial es así de simple: la Comunidad no tiene competencias en materia penitenciaria.

El proyecto de Soto del Real corre a cargo del arquitecto Rafael de la Hoz. Según fuentes de Justicia, el edificio será de escasa altura y tendrá una disposición escalonada. La nueva cárcel permitirá poner fin a la situación de hacinamiento de Yeserías, que acoge actualmente a 490 reclusas (más del doble de su capacidad).

Las nuevas prisiones de Navalcarnero y Valdemoro acogerán en total a 1.050 reclusos. Estos dos proyectos se enfrentaron también a la resistencia de los ayuntamientos, de mayoría socialista, que recriminaron a Justicia la falta de diálogo para decidir la ubicación de los centros.

La región de Madrid cuenta con 10 centros penitenciarios, repartidos entre Carabanchel, Yeserías, Alcalá de Henares y Meco. Estos centros acogen a 4.756 internos, frente a las 3.100 plazas de capacidad real.