Un Mercedes blanco fue la vista que llevó al dinero

Un vehículo Mercedes de color blanco fue la pista que llevó hasta el dinero que guardaba el etarra José Félix Pérez Alonso, detenido ayer en Bayona (Francia), y que supuestamente constituye el rescate pagado por la libertad del industrial soriano Emiliano Revilla, secuestrado por ETA hace dos meses. El coche estaba matriculado en Madrid, y fue visto la pasada semana en Bayona. El seguimiento de ese vehículo con la sospecha de que portaba el rescate condujo finalmente a interceptar los 725 millones de pesetas.

La policía francesa no facilitó ayer el relato oficial de lo ocurrido en la Alameda del Gran Paraíso, de Bayona, sobre las ocho de la mañana. Los únicos datos de que se dispone son los aportados por los vecinos de la zona en donde se desarrollaron los acontecimientos.Alrededor de las ocho de la mañana, según estas informaciones, una persona que viajaba en una moto se detuvo frente al número ocho de la alameda, y, al percatarse de la presencia policial, efectuó varios disparos.

Dos de ellos alcanzaron a una inspectora de policía -Catherine Shalck, según se informó después-, mientras que un tercero impactó en la pierna de quien sujetaba el arma (el etarra José Félix Pérez Alonso). Mientras se producía el enfretaniÍento, una persona -que según la policía responde a la identidad de Iftaki Aguirre Sainz-, huía del lugar en un vehículo deportivo de color rojo. Horas más tarde era detenida su esposa, una ciudadana francesa.

Desde primeras horas del domingo la zona donde tuvieron lugar los hechos ayer se encontraba vigilada por efectivos policiales, a raíz de seguirse los movimientos del Mercedes blanco. En la noche del lunes al martes habían llegado a Bayona, procedentes de París, los ocho integrantes de un comando de superpolicías del Raid aparentemente destinados a intervenir en alguna acción policial, informa la agencia Efe.

La operación policial fue realizada finalmente por cerca de 20 miembros de las PAF y del Grupo Raid (comandos de intervención equivalentes a los GEOS españoles), de manera conjunta.

Los 725 millones de pesetas incautados se encontraban en el interior de una maleta de color marrón. Mientras algunas fuentes apuntan que la maleta la tenía el detenido, otras indican que se encontraba en el interior de un automóvil aparcado en las inmediaciones del lugar. Tampoco ha quedado claro si el dinero llegaba a la casa de la que ETA disponía en la alameda o si salía de allí.

. El jefe de la Policía de Aire y Fronteras (PAF), de los Pirineos atlánticos, Jean Pierre Idiazábal, encargado de la operación policial, indicó a primeras horas de la mañana de ayer que el dinero "era una transferencia de ETA" y que la operación podía estar relacionada con el industrial Emiliano Revilla.

Los vecinos del inmueble indicaron que no conocían a ninguna de las dos personas que en la mañana de ayer habían estado en la Alameda, un lugar que supuestamente había sido elegído llevar a cabo el trasvase del dinero entre el presunto miembro de ETA detenido, Juan Félix Pérez, e Iñaki Aguirre, el que consiguió huir.

El dinero incautado por la policía fue trasladado a la central de la PAF, en la comisaria de Hendaya, una vez que culminó la operación policial en B&yona.

Alrededor de las 16.45 horas, cinco coches policiales salieron del edificio de la comisaria, y en el interior de uno de ellos, en el asiento trasero del vehículo, eran llevados los núllones encontrados en la Alameda del Gran Paraíso. Los 725 millones de pesetas, en bifletes de 5.000, se encontraban en el interior de una maleta de viaje, de grandes dimensiones, con fuelle en la parte inferior, de color marrón claro. Los policías, que pertenecían al cuerpo especial, se trasladaron al aeropuerto de Biarritz, lugar desde donde iban a trasladarse a París. El dinero requisado se entregará casi con toda probabilidad al juez Legrand, magistrado encargado de asuntos de terrorismo.

Las dos personas heridas fueron trasladadas al hospital Saint Leen de Bayona, donde fueron intervenidas quirúrgicamente a primeras horas de la tarde de ayer. Los partes médicos, tanto de la inspectora Catherine Shalck como del presunto etarra José Félix Pérez indican una evolución favorable de sus heridas.

El presunto miembro de ETA, José Félix Pérez Alonso Clementín tiene 30 años de edad y es natural de Baracaldo (Vizcaya). Residía en este país desde 1979, lugar donde había huide) al estar acusado por la policía española de haber cometido varios atentados contra concesionarios de vehículos de fabricación francesa. En 1987, el juez Legrand dictó una orden de busca y captura contra él. Desde entonces estaba intentado ser localizado por la policía francesa.

El segundo de los presuntos etarras que, según la policía, intervino en estos hechos, y que no pudo ser detenido al huir en un automóvil, Iñaki Aguirre Sainz, tiene 40 años de edad y está nacionalizado francés, al estar casado con una ciudadana de ese país. Huyó a Francia hace muchos años debido a que no quería cumplir el servicio militar, según indicaron algunos medios. Aguirre Sainz estaba empleado como cocinero en la clínica Lafourtcde de Bayona.

La Policía de Aire y Fronteras indicó que es posible que en el transcurso de la jornada de hoy se ofrezca una rueda informativa en la que se facilite todo lo relativo a la operación policial, considerada una de las más importantes llevadas a cabo contra la organización terrorista.