Craxi dice que 'el gran viejo' que maneja el terrorismo está en Roma

Mientras el nuevo Gobierno de Ciriaco de Mita no encuentra escollos en el Parlamento -la Cámara de Diputados le otorgó ayer su voto de confianza-, el comentario político de las últimas horas está centrado en el avispero levantado por unas declaraciones del lider socialista Bettino Craxi, quien ha afirmado que el cerebro del terrorismo, un gran viejo que está incluso por enicima de las Brigadas Rojas, está en Roma.

Craxi había lanzado hace 10 años, en pleno clima de violencia tras el secuestro y asesinato de Aldo Moro, la hipótesis de que en Italia existe lo que él llamó entonces il grande vecchio (el gran viejo), alguien que manejaba todos los hilos del terrorismo. Sobre el tema se discutió durante años. Se hicieron mil hipótesis; se dijo que este gran viejo residía en París; otros pensaron en Licio Gelli y, puesto que en este país, ningún misterio puede quedar sin que salpique al divino Andreotti, hubo hasta quien pensó en el famoso líder democristiano.

Después la idea se fue esfumando, y ahora, Craxi, tras el asesinato del senador Roberto Ruffilli por parte de las Brigadas Rojas, ha vuelto a poner el dedo sobre la llaga, dando incluso datos concretos y afirmando que dicha mente está en Roma.

Le ha hecho coro Salvo Ando, el responsable de los asuntos del Estado dentro de su partido, afirmando que dicho gran viejo " ha tenido fuertes experiencias de izquierdas, es un auténtico maestro y sabe escribir documentos que son verdaderos tratados de política". Alguien ha lanzado la hipótesis de que Craxi podría referirse, más que a una persona, a los servicios secretos israelíes, deduciéndolo del duro ataque lanzado el miércoles en el Parlamento contra el Gobierno de Jerusalén.

Las Brigadas Rojas, por su parte, se atribuyeron ayer el asesinato de Ruffilli, en un texto de seis folios que dicho grupo dejó en un bar situado en el centro de Roma.