Barranco considera factible reducir la edificación de las torres de plaza de Castilla

Juan Barranco, alcalde de Madrid, afirmó ayer que no tiene una postura inamovible sobre una posible reforma del Plan General de Ordenación Urbana que suponga una reducción de la edificabilidad adjudicada (125.000 metros cuadrados) a las torres que el grupo kuwaití KIO levantará en la plaza de Castilla. "La reforma del Plan se puede hacer pero hay que ver los pros y los contras y, en este caso, es fundamental saber cuánto dinero tendría que poner encima de la mesa el pueblo de Madrid para realizar una expropiación"."Como vecino de la zona me molesta que en la plaza de Castilla se construyan dos torres de 27 plantas, igual que en su día me molestó la construcción de la torre situada frente al edificio de los juzgados", afirmó ayer el presidente del Gobierno regional, Joaquín Leguina. Leguina afirmó que había hablado del tema con Barranco y que el alcalde le había dicho que tampoco a él le gustaba el proyecto, "pero que el Ayuntamiento se encuentra atado de pies y manos jurídicamente hablando".

Leguina recordó que existe un dictamen del Consejo de Estado que daba el visto bueno a una operación similar: "Los dictámenes del Consejo de Estado no son legalmente vinculantes, pero la verdad es que un dictamen del Consejo tiene mucho peso y no se puede olvidar".Alegaciones

La asociación de vecinos San Cristóbal, de la plaza de Castilla, ha pedido al Ayuntamiento de Madrid que muestre los documentos que prueben que Urbanor era propietaria de solares en la zona, así como los documentos de la permuta por los que Urbanor se hizo propietaria de los terrenos donde ahora se quiere construir dos torres de 27 plantas cada una. Por su parte, Jesús Espelosín, responsable del área de Urbanismo municipal, ha anunciado que se están recopilando los documentos en cuestión, para ser repartidos entre los concejales y la prensa la próxima semana.

La presunta inexistencia de solares propiedad de Urbanor, es la principal de una serie de alegaciones que la asociación de vecinos ha presentado en el nuevo período de alegaciones públicas. La asociación se basa asimismo en que los terrenos donde se construyó la calle Agustín de Foxá fueron expropiados en su día para dotar de un acceso directo a la estación de Chamartín, por lo que no puede ahora desaparecer y ser ocupada por una torre.

La asociación ha recopilado información y documentos de los años cincuenta y anteriores. "Los terrenos para la estación de Chamartín fueron expropiados en tiempos de la República, cuando Urbanor ni existía siquiera", matizó la portavoz vecinal. "Ahora, Espelosín ha mantenido en diferentes ocasiones que la permuta se hizo a cambio de unos terrenos que cedió Urbanor, y que eran necesarios para la construcción de la estación. La asociación piensa que Urbanor nunca tuvo terrenos en esa zona. Hay que recordar que Espelosín ya se equivocó en la existencia de la famosa sentencia del Tribunal Supremo".

La asociación ha pedido la dimisión de Jesús Espelosín, de Pilar García Sacristán, concejala de Chamartín, y de Leandro Crespo, concejal de Tetuán.