"Desamparado y ligeramente incordiado"

José María Aznar se ha sentido "desamparado y ligeramente incordiado" desde la dirección nacional de Alianza Popular. Así lo afirmó anoche el propio interesado, después de asegurar que la situación en AP es "igual" a la que existía hace año y medio, cuando se produjo la dimisión de Manuel Fraga.Aznar hizo estos comentarios en la cena-coloquio que siguió a su conferencia en el Club Siglo XXI. No estaba presente el líder de AP, Antonio Hernández Mancha, quien fue una de las primeras personas que abandonó el club. En su ausencia, el vicepresidente de AP, Alberto Ruiz Gallardón, espetó a Aznar, ante más de seiscientas personas: "¿Ese proyecto, que tú has expuesto, puede y debe ser presidido por Antonio Hernández Mancha?"

El interrogado utilizó muchas palabras antes de aceptar, finalmente, que Hernández Mancha podría liderar el proyecto. "Yo no he sido, ni tengo aspiración de ser, alternativa de nadie", explicó Aznar. "Quiero hacerlo bien en Castilla y León y triunfar en las próximas elecciones, para tener una situación más cómoda que la actual. Nuestra obligación es contribuir a que Castilla y León participe lo más posible en la vidsa política nacional, pero eso no es pretensión personal ni ánimo de actuar como alternativa". Y añadió: "Por mi parte no hay nada que impida o dificulte que Hernández Mancha sea el presidente de Alianza Popular. Nunca seré obstáculo para ello".

Sin embargo, Aznar dejó muy claro que faltan dirigentes de importancia en la actual dirección de AP. Mencionó expresamente a Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, de quien dijo que "AP no puede permitirse tener mudo a uno de los más brillantes parlamentarios de la democracia española y una de las cabezas del centro-derecha español". También recomendó que "se haga caso" a Fraga.