Una psiquiatra feminista, candidata a la presidencia del Colegio de Médicos de Madrid

Carmen Sáez Buenaventura, psiquiatra en el hospital-Gregorio Marañón, de Madrid, vinculada al movimiento feminista, encabeza la candidatura presentada por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) a la presidencia del Colegio de Médicos de Madrid. Es la primera vez que una mujer se presenta para este cargo, cuya elección se celebra el próximo día 9 de marzo. El plazo para la presentación de candidaturas se cerraba a las cero horas de hoy. Carmen Sáez; Javier Matos, actual presidente del Colegio; José María Valoria, cirujano pediátrico, y Gonzalo Bravo, director médico del hospital Puerta de Hierro, se disputan los votos de 22.000 colegiados.

Gonzalo Bravo, que en un principio había anunciado su intención de presentarse, postergó la decisión de presentarse hasta el último momento, ante la crispación que ha agitado en los últimos días a los sectores sanitarios.Casi hasta ultima hora se mantuvo la incógnita de si la FASDP, que en las elecciones celebradas hace cuatro años quedó a sólo 800 votos de Matos, se decidiría a concurrir nuevamente a estas elecciones u optaría, en cambio, por dar su apoyo a otro candidato. Finalmente la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid, una organización de carácter progresista presidida por Juan Luis Ruiz-Jiménez, decidió presentar a Carmen Sáez, de 49 años, con el propio Ruiz-Jiménez como vicepresidente.

Según manifestó ayer Juan Luis Ruiz-Jiménez, la decisión se tomó porque entienden que "hay un sector médico muy amplio que no se compagina con los candidatos anunciados". La doctora Sáez, ex presidenta de la Asociación Española de Neuropsiquiatría, que es muy conocida por su vinculación al movimiento feminista, intentará defender los tres puntos básicos del programa de la FADSP: libertad de colegiación, democratización del colegio y, por último, girar el actual papel político de ese organismo hacia una* función más profesional y científica. La doctora Sáez, que se encontraba ayer de guardia en el hospital, adujo, telefónicamente, que un exceso de trabajo no le permitía explicar ayer ampliamente su programa ni recibir a un fotógrafo de EL PAÍS.

Las elecciones al Colegio de Médicos de Madrid, que cuenta con 22.000 colegiados, se adelantaron tres meses sobre la fecha prevista, junio de este año, con el anuncio de Javier Matos -que a sus 64 años ha cumplido dos mandatos de cuatro años al frente del colegio- de que no se presentaría a la reelección.

Matos, además, apadrinó por escrito a José María Valoria -jefe de cirugía pedriátrica en la Fundación Iménez Díaz- como su candidato, considerándole el hombre que representaba la continuidad con la política médica desarrollada por el colegio de Médicos Madrid.

Pero a última hora Javier Matos -que representa a la línea más conservadora y mantiene un duro enfrentamiento con el Ministerio de Sanidad y Consumo y con la Organización Médica Colegial (OMC) desde que Ramiro Rivera fue sustituido hace un año por Ricardo Ferré- anunció finalmente que, para que el colegio no cayera en manos de la izquierda, se presentaba para una tercera reelección.

Este cambio de actitud provocó la retirada de algunos aspirantes que habían anunciado su intención de presentarse. Éste fue el caso de Juan Blázquez, ex secretario general de la Confederación de Sindicatos Médicos (CESM). La posible presentación de Blázquez, que abandonó su cargo tras firmar los acuerdos salariales con el Instituto Nacional de la Salud (Insalud) el año pasado, provocó un amplio malestar en el seno de su organización.

Malestar

El malestar suscitado por los pactos y las alianzas que se han anunciado y desmentido en los últimos días tiene su reflejo más claro en la paradójica situación del doctor Valoria y el disgusto del doctor Gonzalo Bravo. Ambos fueron los primeros facultativos que anunciaron su intención de convertirse en el próximo presidente de los médicos de Madrid, presentándose como los candidatos del centro-derecha, el primero, y del centro-izquierda, el segundo.A última hora de las tarde de ayer, Valoria, que lleva en su candidatura a vanos hombres de confianza de Matos, esperaba mantener una conversación que le aclarase el cambio de actitud de su valedor para tomar una decisión definitiva. Valoria manifestó ayer que su candidatura es la "ganadora", y agregó: "Aún creo en las palabras y en las firmas de las personas, no entiendo la actual situación, ya que Matos, que es una persona de criterio, me dio su apoyo. Ante esto tengo que sentirme manipulado".

"Puramente profesional"

Valoria, que califica su candidatura como "puramente profesional, de talante liberal y progresista", se muestra claramente partidario de un sistema de sanidad mixto, que incluya tanto la libre elección de médico como de hospital.Valoria cuenta también con el apoyo de la Coordinadora de Médicos de Hospitales, y lleva al presidente de esta organización como aspirante a la secretaría general del colegio madrileño.

Por su parte, Gonzalo Bravo, que parece contar con el apoyo de la Organización Médica Colegial (OMC), mantuvo una reunión a las nueve de la noche de ayer, tres horas antes del cierre del plazo de presentación de candidaturas, en la sede de esta organización, en la que decidió optar a la presidencia del colegio de Médicos de Madrid o no.

El doctor Bravo manifestó ayer que sus dudas se debían a que el cariz que ha tomado esta campaña no le gusta. "Si no me presento es, únicamente, por disgusto personal. No soy partidario de que la ropa interior de los médicos se lave en público", agregó.

Gonzalo Bravo, director médico de la clínica Puerta de Hierro, había anunciado que se presentaba a las elecciones con la intención de aglutinar el mayor número posible de fuerzas. "Pero no sé si esto será posible", concluyó.