Miguelín padecía frecuentes depresiones

El torero Miguel Mateo, Miguelín, de 48 años de edad, que según todos los indicios intentó suicidarse el pasado domingo, ha estado sometido a tratamiento médico en varias ocasiones por sus constantes depresiones. El diestro, que sostuvo el pasado domingo, unas horas antes de autolesionarse, una fuerte discusión con su familia se encontraba ayer internado en la unidad de cuidados intensivos de la clínica Puerta Europa, sometido a una fuerte medicación psicotrópica, después de pasar tranquilo la noche del lunes al martes.

, ENVIADA ESPECIAL, La centralita de la clínica estaba bloqueada por las llamadas de todo el mundo para interesarse por la salud del torero, que podrá abandonar el hospital dentro de 10 días, según los doctores que le atienden.Miguelín aseguró después de la disputa familiar a algunas personas de su entorno que en su casa iba a ocurrir una tragedia. Tres horas más tarde se clavaba, presuntamente, unas enormes tijeras en el estómago. En su domicilio se encontraban en ese momento la madre del torero, su esposa, su cuñado y su hijo Miguel. El torero, según testigos del suceso, bajó andando hasta el portal de su vivienda, situada en el primer piso. El diestro iba acompañado de su hijo y esperó en el portal a que llegara la ambulancia. Al ser trasladado al centro sanitario, Miguelín se rajó la herida con sus propias manos. El diestro, que se encontraba en un fuerte estado de excitación, tuvo que ser reducido por cuatro personas para evitar que se causara lesiones mayores.

La noticia cayó como una bomba en la ciudad de Algeciras, cuyos habitantes se reparten entre miguelistas y antimiguelistas. La familia del diestro se ha negado a realizar ningún tipo de declaraciones, y en la ciudad se han desatado rumores de todo tipo, incluido la duda de que fuera el propio diestro quien se autolesionó.

Fuentes próximas al mundo del toreo aseguraron ayer que el herido había estado sometido a tratamiento psiquiátrico en numerosas ocasiones. Las mismas fuentes precisaron que había sido tratado en la madrileña clínica López Ibor, y que entre los médicos que le han atendido figura Carlos Castilla del Pino.

Muchas personas no creen en Algeciras que el torero se hubiera sometido a una dieta de adelgazamiento. "Su estado físico era excelente. Él es un hombre recio pero delgado", según los que le conocen. A diario hacía footing y se mantenía en perfecta forma física. El torero, que se retiró en 1979, pensaba volver a torear con motivo del 30º aniversario de su alternativa. En las últimas semanas había agudizado su preparación física por este motivo.

Su primer becerro

Miguelín nació en Alcantarilla (Murcia), pero vive desde pequeño en Algeciras, y en la ciudad se le conoce como el torero de Algeciras. Estudió en los salesianos, y cuentan que fue en el patio del colegio donde mató su primer becerro con un traje celeste y plata que le hicieron a la medida. El monstruo, como le llaman algunos aficionados, desciende de una familia humilde, pero gracias a su trabajo en los ruedos disfruta de una "inmejorable situación económica".Para algunas personas, Miguelín es millonario. Además de la vivienda que ocupa con su familia, posee un cortijo llamado La Doctora, en el que tiene reses bravas y una pequeña plaza de toros. En la finca hay también una cantera, propiedad del torero, que "es una mina", según algunos aficionados.

El matador fue descrito por las personas que le conocen como un hombre de facultades portentosas, aunque algo extraño e introvertido. Los aficionados aseguran de él que sabe más de toros que las vacas. Como muestra de su carácter, aseguran que después de una tarde de triunfo en la Maestranza de Sevilla no se quedó ni un solo minuto con las personas que esperaban para felicitarle por la faena y se marchó directamente a su casa.

Pese a los muchos años que estuvo en activo, compartiendo cartel con Ordóñez, El Viti y Luis Miguel Dominguín, entre otros, el diestro no tiene apenas cicatrices en el cuerpo. Algunos vecinos de Algeciras aseguran que, pese a su buena suerte, el diestro está marcado por la tragedia.

Hace siete meses, el torero Pedro Castillo, que aseguran que era su protegido, estoqueó a un empresario causándole graves lesiones porque no le había incluido en el cartel de la feria de Algeciras, que se celebraba entonces. Castillo se encuentra actualmente cumpliendo condena en la prisión de Algeciras. Miguelín llegó a hacer dos películas, El momento de la verdad y El Relicario, la última con Carmen Sevilla.

Los médicos que le atienden dicen que en 10 días Miguelín podrá volver a su casa. Fuentes próximas a la familia especulaban ayer con la posibilidad de que el torero fuera trasladado, a la salida del hospital, a una clínica privada, donde continuara el tratamiento.