'Los Albertos' tendrán cuatro consejeros en el Banco Central, que serán siete tras la junta de junio

La junta general extraordinaria del Banco Central, celebrada ayer por la mañana en Madrid constituyó un plebiscito para Alfonso Escámez. Descargada de la tensión que hubiera supuesto llegar a la junta sin acuerdo con Cartera Central, el primer accionista, la reunión de ayer discurrió por cauces de cierta placidez. La junta refrendó el nombramiento de consejeros a Fernando Abril, Antonio Beteré y Romualdo García Ambrosio, este último por Cartera Central, y aprobó la amplíación del consejo de los 18 miembros actuales a 22. Los cuatro nuevos serán ocupados por hombres de Cartera Central. Alfonso Escámez pasó de puntillas sobre el tema del acuerdo alcanzado con Cartera Central, lo que sin duda se convrtió en lo más llamativo de la sesión de ayer.El verdadero interés de la junta general extraodinaria del Banco Central residía en conocer las explicaciones que su presidente daba sobre el acuerdo relámpago aicarizado en la noche del miércoles 20 de enero entre el primer accionista de la casa, Cartera Central, y el propio Alfonso Escámez, tras varias jornadas en que los puñales salieron a relucir entre ambas partes. No hubo nada. Eseámez pasé de puntillas sobre el tema al final de su intervención, convirtiéndolo, con las frases retóricas de rigor, casi en uri dato anecdótico. Al final rehuyó comparecer ante los periodistas, como es tradicional en esta clase de actos. En suma, el misterio sigue.

Algunas cosas se van sabiendo. La junta extraordinaria de ayer, convocada el 23 de noviembre en Valencia para explicar los datos económicos del ejercicio de 1987, aprobó una ampliación del consejo de administración a 22 miembros desde los 18 actuales. Los cuatro nuevos consejeros corresponderán a Cartera Central, y uno de ellos, Romualdo García Ambrosio, fue ayer mismo investido como tal.

Interpretación de estatutos

El nombramiento de los tres restantes se producirá en la primera reunión que celebre el consejo de administración de la entidad, aunque su ratificación no tenga lugar hasta la próxima junta general ordinaria, fijada para el 25 de junio. Ayer, Alfonso Escámez, interpretando con liberalidad los estatutos de la entidad, nombró y ratificó como consejero a García Ambrosio en la misma sesión, resolviendo así el problema creado en torno a la ratificación de Antonio Beteré. Para ello fue preciso, a última hora del viernes 22, efectuar un retoque de urgencia a los estatutos en el Registro Mercantil de Madrid.

Los cuatro consejeros de Cartera Central son, sin embargo, el primer paso. En efecto, se conoce ya que la sociedad creada por Construcciones y Contratas y el grupo KIO contará con hasta siete representantes en el Consejo de Administración del Banco Central, a tenor de los términos del acuerdo alcanzado entre Escámez y los Albertos. El acceso al consejo de los tres nuevos miembros se aprobará en la citada junta general de junio, mediante la realización de una nueva ampliación del consejo, que pasará así de 22 a 25 miembros.

Los estatutos del banco señalan que el número de consejeros estará comprendido entre un mínimo de 15 y un máximo de 30. Con ello, Cartera Central, con el 12,6% del capital social, pasará a controlar directamente el 28% del consejo de la entidad. Conviene notar que, de acuerdo con la información facilitada por la entidad a la Securities and Exchange Commission norteamericana para cotizar en Wall Street, el consejo de la entidad controlaba directamente en 1985 el 0,71 % del capital social del banco.

Alfonso Escámez, sin embargo, sí envió varios mensajes a los nuevos accionistas mayoritarios, al afirmar, al menos en un par de ocasiones, que para la junta de ayer contaba con la delegación de voto de más de 130.000 pequeños accionistas, equivalentes al 52,2% del capital social de la entidad, más otro 20% controlado directamente por el consejo. En suma, control sobre más del 70% del capital social. "Mientras esto siga siendo así", aseguró Alfonso Escámez, "seguiré al frente de este banco disponiendo de vuestra confianza". Todo un aviso a los navegantes.