Un joven causa el pánico en Madrid al conducir de forma temeraria un autobús que había robado
Un joven que conducía un autobús que acababa de robar en el madrileño barrio de Carabanchel, causó anoche el pánico entre gran número de automovilistas y peatones, provocando al menos cuatro heridos graves, según informaron fuentes policiales. A primeras horas de esta madrugada, el caso estaba rodeado aún de numerosas incógnitas y se desconocían los motivos de la conducta de dicho individuo, que permanece detenido en la comisaría del distrito de Vallecas.
Las citadas fuentes indicaron que Miguel Ángel González Peseñil, de 21 años, robó el autobús matrícula FM-42654 a última hora de la tarde de ayer. Una patruIIa de la Policía Municipal le descubrió poco después cuando conducía el vehículo por una calle de Carabanchel.Al verse acosado, el joven emprendió una veloz huída y en varios momentos logró despistar a los agentes que le perseguían. La policía consideraba anoche que Miguel Ángel González debió de dirigirse a continuación por la glorieta del Marqués de Vadillo hasta la M-30. El joven fue descubierto de nuevo en el distrito de Retiro.
Sin hacer el menor caso a las señales que le daban los agentes para que se detuviera, el joven aceleró, y circuló a gran velocidad por la avenida del Mediterráneo, plaza del Conde de Casal, calle del Doctor Esquerdo y avenida de la Ciudad de Barcelona. En esta última colisionó con un taxi.
Pese al cerco establecido por la Policía Municipal, el conductor del autobús se dirigió a la avenida de la. Albufera, causando el pánico entre los automovilistas y los peatones.
Según fuentes policiales, en la citada avenida el joven logró despistar de nuevo a sus perseguidores. Al parecer, González Peseñil llegó hasta la calle del Arroyo del Olivar, donde se estrelló contra un Talbot Horizon. Los cuatro ocupantes del turismo, entre ellos una niña de 18 meses, resultaron heridos graves. Las víctimas, cuya identidad se desconoce todavía fueron trasladadas al hospital Gregorio Marañón.
El joven volvió entonces a la avenida de la Albufera, donde finalmente fue cercado. A la altura del barrio de Palomeras la Policía Municipal abrió fuego contra las ruedas del autobús y logró que éste quedara inmovilizado. El conductor fue trasladado a la comisaría del distrito de Vallecas, donde esta madrugada prestaba declaración. Miguel Angel González es feriante de profesión y, aunque se creía inicialmente que pudiera estar ebrio, la impresión de la policía es que no había bebido alcohol.
Durante su declaración tampoco dio señales de estar perturbado.
Al cierre de esta edición se desconocía el número exacto de vehículos dañados por el joven.
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