"El ala izquierda está representa por Alfonso Guerra"

El secretario de organización del PSOE, Txiki Benegas, asegura que su partido no ha abdicado de los principios que conforman a un partido de izquierdas y que su aspiración "sigue siendo la superación de las injusticias que genera un sistema como el capitalista". Este dirigente trata de establecer que las acusaciones al PSOE de haber abandonado sus señas de identidad carecen de fundamento, y se precipita en un discurso socializante para concluir en lo ocioso de quienes proponen la creación de un sector de izquierda en la organización: "El ala izquierda en este partido es Alfonso Guerra".En vísperas del 319 congreso, los malos augurios que pesaban sobre el futuro político de Benegas se han desvanecido ante las muestras de apoyo que el secretario general, Felipe González, le ha dispensado, que le harán mantenerse con poderes renovados en el número tres del organigrama.

Los sondeos que manejan en el partido les tranquilizan. "El PSOE tiene un grado de rechazo muy pequeño, y después de cinco años de Gobierno la valoración de los ciudadanos sobre nuestra gestión es muy alta. España tiene hoy un proyecto nacional sin incertidumbres, y el país se ha saneado económicamente. Ahora está surgiendo una sociedad muy dinámica y exigente, y los ciudadanos nos exigen más", dice Benegas, muy interesado en "combatir la especie de que ahora se vive peor que en 1982". Para ello ofrece multitud de datos comparativos: "En 1982 la renta anual por habitante era de 511.670 pesetas; en 1986 era de 825.000; el salario mínimo desde ese año ha crecido un 48,2% la población sanitaria asistida ha pasado de un 85% a un 96%; los españoles dedicaban en 1982 un 43% de su salario a alimentación, y ahora, un 29%, lo que indica que tienen más dinero para otros gastos. Se venden más coches. Aumentan las ventas de los grandes almacenes. Claramente, se vive mejor".

Benegas asegura que "España en su conjunto funciona", aunque quieren abordar "una nueva etapa" en la que se dedicarán más recursos a sanidad, justicia,infraestructura y "reforma de la Administración, que se ha revelado como un problema muy complejo".

El secretario de organización no encuentra dificultades en que la opinión pública descubra que el PSOE es de izquierda. "Primero, se ve por nuestra ideología y los valores que defendemos. El PSOE sigue aspirando a superar democráticamente las injusticias y desigualdades que genera un sistema como el capitalista. En la medida en que se superen, avanzaremos hacia otro sistema más identificable con los principios del socialismo democrático en el que, además de la libertad, sea fundamental la solidaridad, la igualdad y la justicia social".

En un esfuerzo por acercar esos principios a la realidad del país, Benegas reconoce que laigualdad no puede ser un concepto abstracto, sino que "hay que ir fijando prioridades y objetivos Lo que estamos discutiendo son cuáles son los elementos más eficaces para redistribuir la renta y garantizar unos mínimos universales a toda la población. A nosotros nos ha tocado innovar porque la socialdemocracia europea consiguió grandes logros en período de crecimiento económico".

Entre familia

Benegas pospone la solución de los problemas con UGT para después del congreso y se duele de las críticas a la labor del Gobierno que vienen desde el sindicato. "Son las críticas que más deslegitiman, porque son entre familia y para la opinión públicano aparecen como discrepancias sindicales sino entre dirigentes socialistas". Por el contrario, él se siente "muy orgulloso" de defender la gestión de su Gobierno. Asegura Benegas que en el partido "no hay miedo" para debatir, sino total libertad para la discrepancia "siempre que se haga en los órganos interrios".Benegas atribuye al "fracaso" de la corriente Izquierda Socialista el que sus dirigentes propongan ahora la creación de un ala izquierda en el partido. "Eso no va a ser un empeño fácil, porque quien mejor representa el ala izquierda en este partido es Alfonso Guerra. No creo que se pueda construir ese ala con personas que escriben que les da pereza volar 4.000 kilómetros para asistir al congreso del PSOE" [Ignacio Sotelo].