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El Ejercito desplegará misiles antibuque en las proximidades del Estrecho

Carlos Yárnoz

Las unidades del Ejército de Tierra encargadas de la defensa de costas en el sur de la Península contarán en los próximos meses con misiles antibuque Harpoon, de origen estadounidense, con el fin de incrementar el control de los accesos al estrecho de Gibraltar, según informan fuentes oficiales. Los misiles, que tienen un alcance de un centenar de kilómetros, serán desplegados en los accesos al Estrecho por el Mediterráneo y el Atlántico.

Este plan del Ministerio de Defensa coincide con el amplio programa consistente en desplazar hacia el sur de la Península el potencial del Ejército de Tierra y con la intención de las Fuerzas Armadas de incrementar el control del estrecho de Gibraltar. Paralelamente, el mando de la Flota se ha desplazado a la base de Rota (Cádiz), que está siendo potenciada sensiblemente en los últimosLa elección de los misiles Harpoon para la defensa de costas se debe a que la Armada ya dispone de ese tipo de misiles desde 1983 en varias de sus fragatas. Asimismo, también el Ejército del Aire instalará esos ingenios en los aviones F-18A. De esta forma, al unificar los mismos sistemas de armas para los tres ejércitos, se pretende abaratar los costes de mantenimiento y repuestos.

Las fuentes informantes no han precisado cuántas unidades de misiles serán compradas para la defensa de costas. Cada uno cuesta alrededor de 110 millones de pesetas, pero a este coste hay que añadir el de los lanzadores, que al menos serán cuatro. Muy probablemente, los sistemas estarán montados sobre vehículos para permitirles el desplazamiento a los lugares más estratégicos.

Misiles británicos

Sistemas de misiles similares antibuque han sido desplegados a lo largo del pasado año en las instalaciones militares que posee en Gibraltar el Reino Unido, cuyo protagonismo en la zona está descendiendo, a la vez que se incrementa la presencia militar española.El misil Harpoon mide 3,8 metros y pesa 522 kilos. Lleva incorporado un radar para localizar el objetivo, al que se aproxima, a unos tres metros sobre el agua (para evitar su detección), a una velocidad de 800 kilómetros por hora. Cuando el misil se encuentra cerca del blanco, se eleva vertiginosamente y desciende sobre el mismo casi verticalmente.

EE UU, el Reino Unido y Japón son algunos de los países que tienen este tipo de armas en servicio. La Marina de EE UU los empleó en la primavera de 1986 para hundir dos barcos de guerra libios cuando la VI Flota atacó Trípoli.

En la actualidad, las unidades de defensa de costas del Ejército en la zona del Estrecho disponen de cañones convencionales para actuar contra buques. Sólo para la defensa antiaérea cuentan con misiles; concretamente, antiguas baterías de misiles Hawk y Nike, que serán modernizadas.

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Sobre la firma

Carlos Yárnoz
Llegó a EL PAÍS en 1983 y ha sido jefe de Política, subdirector, corresponsal en Bruselas y París y Defensor del lector entre 2019 y 2023. El periodismo y Europa son sus prioridades. Como es periodista, siempre ha defendido a los lectores.

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