Colapso

El 25 de noviembre por la tarde, el habitual caos circulatorio de la zona de Nuevos Ministerios era eso que llaman un gigantesco colapso circulatorio.Por un momento pensé que era obra de esos desalmados que se manifiestan sin pensar en sus compañeros ciudadanos. Creyendo haber acertado, me consolé pensando que por lo menos lo hacían por un buen motivo, por lo que me armé de paciencia. Pero no era por ninguna injusticia. ¡El tapón se había hecho por ir a divertirse! Sí, era uno de esos miércoles que juega el Madrid en el Bernabéu.

Digo yo que no tengo la culpa de que no me guste el fútbol, como tampoco los ciudadanos la tienen de las injusticias que se han cometido contra los que se manifiestan. Por eso pienso que no sería mala idea el crear en vez del manifestádromo un fútbolódromo a las afueras de Madrid, librándonos así, además, de las iras de las hordas bárbaras de los que, desafórtunadamente, han perdido el partido.

Ya sé que la solución se sale de los presupuestos, pero a lo mejor hay algo más sencillo. ¿Qué tal un buen aparcamiento subterráneo? Comprendo que no se le haya ocurrido al Ayuntamiento, o incluso que se piense que no sería rentable. No hay más que ver en la misma zona el Ministerio de Comercio, que no cuenta con aparcamiento público. Probablemente, es preferible el habitual caos vespertino. O los juzgados de la plaza de Castilla, sin aparcamiento también. Dicen que la acera de enfrente del ministerio será zona de ORA. ¡Gracias! Ahora, en el otro lado, contaremos con un caos más concentrado para nuestro uso exclusivo, un caos, pero como más íntimo y familiar.-