La quiebra de la natalidad

Mis demógrafos me dicen, asegura Harri Holkeri, primer ministro de Finlandia y padre de dos hijos, que según las tendencias actuales sólo quedarán dos finlandeses en el año 3000; y si ambos son del mismo sexo, Finlandia estará en apuros. Según las actuales tasas de natalidad, la población de Finlandia (que ha crecido de 2,7 millones a 4,8 entre 1900 y 1980), la de Noruega (de 2,2 a 4,1) y la de Suecia (de 5,1 a 8,3) va a disminuir en el siglo XXI. ¿Qué está pasando? Los políticos afirman que las cifras de fertilidad son engañosas, justo cuando una tendencia parece plenamente clara, la tasa de natalidad se invierte inexplicablemente. Los políticos dicen que el número de embarazos no deseados se ha reducido por los métodos anticonceptivos cada vez más fiables y en la forma en que los abortos han llegado a ser algo corriente. En Suecia los embarazos de adolescentes acaban en aborto más que en nacimiento. En 1984, por ejemplo, la tasa de natalidad por cada mil chicas de edades entre los 15 y 19 años fue 10,9 y la tasa de abortos 17,5.Se preguntan si la campaña de las agencias de ayuda y desarrollo para detener una explosión demográfica persuadiendo a los países pobres para que tengan menos niños, está teniendo un efecto de rebote en los países industriales. Es duro para los Gobiernos decir a la gente de otros países que tienen demasiados niños a la vez que tratan de convencer a sus conciudadanos de que tienen pocos.

28 de noviembre