Venganza mafiosa

Todas las circunstancias que concurren en el secuestro de la niña Melodie, hija de la princesa Kimera y el multimillonario Raymond Nakachian, hacen pensar que los autores del mismo están realizando una sutil y refinada venganza de tipo mafioso."Veo claramente que me atacan a mí", ha dicho el padre de la pequeña en un momento de franqueza con los periodistas. Más tarde trató de rectificar y dijo: "No tengo enemigos. No hay gente que me quiera tan mal. Quisiera saber de quién se trata y tener una pista, porque entonces iría contra ellos. Pero no sé quiénes son".

Uno de los funcionarios que intervienen en las investigaciones comentó: "Raymond Nakachian es un hombre que tiene muchos amigos, pero también tiene muchos enemigos a consecuencia de sus negocios. Hay que tener en cuenta que en su mundo hay intereses muy fuertes y que se mueven grandes sumas de dinero". El mismo experto, sin embargo, aseguró que hasta el momento no se sabe quién es la persona o el grupo que quiere ajustar cuentas a Nakachian de una forma tan cruel.

La policía, junto con el padre de la niña, está realizando un estudio de todos y cada uno de los personajes que pueden haber tenido relación con él a fin de tratar de encontrar algún indicio sobre la identidad del autor de esta venganza.

Los expertos en delincuencia internacional están realizando un discreto y profundo rastreo de ciudadanos del Reino Unido. Las pesquisas se basan en matrículas de coches británicos y en el control de personas de esta nacionalidad que se muevan o se alojen en establecimientos cercanos a Puerto Banús.