Marín y Fernández Tojo se disputan hoy la secretaría del metal de CC OO
Juan Ignacio Marín e Ignacio Fernández Tojo se disputan hoy la secretaría general de la federación del metal de CC OO en la última jornada del cuarto congreso de la organización, que se clausura hoy en Vigo. Ayer, los trabajos se centraron en analizar el informe presentado por Marín recogiendo la gestión de la ejecutiva saliente. Ésta fue criticada duramente y rechazada por las corrientes mayoritarias de las ocho federaciones regionales más importantes.
Cuatro listas de candidatos a la ejecutiva federal y tres a la secretaría general se presentaron ayer en el congreso del metal de CC OO, pese a que las previsiones indicaban que sólo habría dos o tres. Juan Ignacio Marín, carrillista, no supo aglutinar a las corrientes más radicales de su federación, aunque lo intentó hasta el último momento. En consecuencia, hoy opta a la reelección para la secretaría general frente a Ignacio Fernández Tojo, el candidato con más posibilidades, apoyado por la corriente camachista y las delegaciones mayoritarias de ocho de las 12 federaciones regionales.El tercer aspirante es Ramón Gorriz, trabajador de la empresa General Motors de Zaragoza y apoyado por el Movimiento Comunista-Liga Comunista Revolucionaria, que dirige Joaquín Nieto.
Además hay una cuarta lista a la ejecutiva que no presenta candidato a la secretaría general y que han promovido antiguos miembros del partido comunista de Ignacio Gallego y apoyan los radicales de Sagunto. Esta lista está encabezada por Jesús Blanco, miembro de la ejecutiva saliente.
Presentación en sociedad
Ignacio Fernández Tojo hizo ayer su presentación en sociedad en el turno de críticas al informe de la ejecutiva saliente. El contrincante de Marín reprochó a éste su estrategia sindical y el poco respeto al pluralismo. Él asegura que no va a marginar a nadie si sale elegido como máximo responsable de la federación metalúrgica.En la explicación de voto de las distintas delegaciones regionales, las mayorías de ocho de las 12 federaciones regionales explicaron por qué iban a votar no a la gestión de Marín. Estas ocho delegaciones, las más numerosas de la organización, son: Madrid, Asturias, Euskadi, Andalucía, Galicia, Cataluña, Cantabria y País Valenciano. Las mayorías de las otras cuatro federaciones sí aprueban el informe. Éstas son: Aragón, Murcia, Castilla y León y una delegación mixta formada por representantes de Castilla-La Mancha, Baleares y La Rioja. En total, 591 delegados (el 60%) votó en contra del informe de la ejecutiva saliente, 336 (33%) lo hicieron a favor y 68 se abstuvieron.
Los dirigentes Rodolfo Benito, secretario general de Madrid; Francisco Martínez, responsable del País Vasco, y el propio Fernández Tojo criticaron a la dirección del metal el haber mantenido una postura ambigua respecto a los fondos de promoción de empleo de la reconversión y el haberse echado atrás en la huelga general propuesta por Marcelino Camacho en marzo pasado y en la lucha contra la ley de pensiones.
Los representantes de las corrientes mayoritarias de Asturias y Valencia calificaron de triunfalista el informe de Marín, porque entienden que la federación no goza de buena salud en organización y unidad interna. Fueron varios los delegados que reprocharon al secretario general saliente el haber formado un secretariado monocolor a raíz del congreso de Santander.
