LA JORNADA EUROPEA DE FÚTBOL

499 personas en el Bernabéu

499 personas tuvieron acceso al partido. Sendas delegaciones oficiales de 70 personas por equipo y 359 informadores acreditados. La prensa escrita acreditó 204 informadores; la radio, 70; la televisión, 24, y tras las porterías, y en algunos casos repartidos por las gradas, hubo 61 fotógrafos.El silencio del estadio fue turbado durante buena parte del primer tiempo por la estridente transmisión de Antena 3, que colocó una megafonía junto al fondo sur del estadio. Mediado el primer tiempo la Policía Municipal obligó a interrumpir esta forma de transmisión.

A partir de ese momento los ruidos del estadio quedaron reducidos a los que se producían en el propio rectángulo de juego y a los gritos de dos pequeños y rivales grupos de animadores. En el palco la delegación italiana fue muy ruidosa. Le daba la réplica un grupo de directivos del Madrid, al que se unieron la mujer de Ramón Mendoza, presidente del Madrid y el alcalde de la ciudad, Juan Barranco. Este grupo desdeñó la posibilidad de estar en el palco y presenció el partido de pie, en la grada de preferencia, y muy abajo, cerca de la banda. Bagni, que se distinguió por su dureza y sus malas maneras, les dedicó algún corte de mangas.

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El vacío empobreció un gran partido

La escasísima ambientación del partido se completó con algunas pancartas colocadas por las peñas madridistas.

El presidente del Madrid dedicó la inmensa mayoría de las 70 plazas a las que su club tenía derecho a empleados del propio club. Sólo destinó un pequeñísimo número de ellos a invitaciones institucionales.

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