Un vagabundo descubre en un descampado el cadáver calcinado de un hombre
El cadáver de un hombre quemado fue encontrado ayer, alrededor de las 10.30, por un vagabundo en un descampado situado en la avenida de Daroca, en una zona próxima al cementerio de la Almudena. El cuerpo, que estaba prácticamente calcinado, se encontraba boca abajo y con las manos recogidas sobre el pecho. La policía especula con la posibilidad de que el cadáver fuera transportado hasta el lugar donde fue encontrado para ser quemado. El descampado es frecuentado por la noche por drogadictos y homosexuales.
La zona donde fue encontrado el cuerpo es un inmenso descampado que se utiliza indiscriminadamente como vertedero de basuras. Un vagabundo que buscaba chatarra encontró el cuerpo calcinado y avisó a unos funcionarios del Ayuntamiento que tienen sus oficinas muy cerca del lugar del suceso. Moisés Alberto Siruela, empleado municipal, comprobó que lo que había dicho el vagabundo era cierto y avisó a la policía. Para llegar hasta el lugar donde se encontraba el cadáver, la policía y varios agentes de la brigada de homicidios atravesaron un pequeño camino lleno de escombros, ante la mirada atónita de las personas que rebuscaban entre la basura. El cuerpo estaba en una pequeña vaguada, tumbado boca abajo y con la manos recogidas sobre el pecho. El cadáver estaba tan calcinado que hasta que no le dieron la vuelta no pudieron comprobar que se trataba de un hombre. Sólo las manos y un trozo del pecho se salvaron del fuego.
La policía aseguró que se trata de un hombre de complexión delgada, de 1,68 de estatura y una edad comprendida entre 20 y 40 años. Fue traslado al Instituto Anatómico Forense y a últimas horas de la tarde de ayer aún no había podido ser identificado.
Algunas de las personas que acostumbran a buscar entre la basura por esa zona aseguraron ayer que el cuerpo estaba allí desde el lunes. El descampado es frecuentado por la noche por yonquis y homosexuales de las zonas de la Elipa y de San Blas. Las mismas fuentes especularon con la posibilidad de que se trate de un ajuste de cuentas entre traficantes. La policía no quiso barajar ninguna hipótesis sobre las posibles causas del crimen.
Los funcionarios municipales explicaron que en la zona se producen pequeños incendios de forma frecuente y que no habían observado nada extraño esta semana.
