Leguina no fue elegido en su primera sesión de investidura

Joaquín Leguina, único candidato a la presidencia del Gobierno regional de Madrid, tendrá que esperar al próximo lunes para ser investido como tal. En la sesión de la Asamblea celebrada ayer no obtuvo los votos necesarios para ser proclamado presidente regional. Leguina sólo obtuvo el sí de los 40 diputados socialistas, por 32 votos en contra, de AP, y la abstención de CDS e IU. El lunes, sus 40 votos le aseguran la mayoría simple, suficiente en la segunda votación.

Isabel Vilallonga, por Izquierda Unida; Fernando Castedo, por el CDS, y Alberto Ruiz Gallardón, por AP, coincidieron en señalar que los socialistas habían desperdiciado cuatro años de mayoría absoluta para poner en marcha la Comunidad de Madrid, y acusaron a Leguina de haber sido demasiado disciplinado respecto al Gobierno de Felipe González, lo que ha motivado, entre otras cosas, que Madrid aún no haya alcanzado su techo máximo de competencias.

Los portavoces de la oposición coincidieron también en que la nueva legislatura tendrá que basarse en un amplio proceso negociador y de colaboración entre todas las fuerzas políticas, y brindaron al candidato a presidente una oposición dura, pero seria y constructiva.

Por su parte, Joaquín Leguina rechazó los argumentos de la oposición y añadió que la consecución de mayores competencias para Madrid no puede hacerse sino en el marco del proceso general del Estado de las autonomías.

En la contestación, Leguina se mostró contemporizador con la oposición y mostró su buena disposición al diálogo con los restantes partidos y con la generalidad de las fuerzas sociales presentes en Madrid. La lucha contra el paro se perfiló como el primer gran problema de la Comunidad.