José Joaquin Sancho Dronda abandonará la presidencia de la CECA el próximo día 22
José Joaquín Sancho Dronda, hasta hace pocos días director general de la Caja de Ahorros de Zaragoza, Aragón y La Rioja (CAZAR), dejará el próximo día 22 la presidencia de la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA), que venía ocupando desde hace 13 años. Alvaro Villagrán, presidente de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Sevilla, será su sustituto, provisional hasta que se complete la renovación de los órganos rectores de las cajas de ahorro y se constituya una nueva asamblea.
El próximo miércoles día 22 se celebrará una reunión del consejo de administración de la CECA y una asamblea general extraordinaria en la que se tomará la decisión de sustituir a José Joaquín Sancho Dronda de su puesto de presidente de la CECA por uno de los dos vicepresidentes actuales. La marcha de Sancho Dronda, retrasada durante un par de años, culminará la semana que viene.Las alternativas a Sancho Dronda se centraban en uno de los dos vicepresidentes actuales de la CECA: José Vilarasau, director general de La Caixa (la primera entidad de ahorro) y Álvaro Villagrán, presidente de la Caja de Sevilla. Ambos fueron consultados sobre la posibilidad de acceder a la presidencia aunque en el caso de Vilarasau se habría hecho "por que no había más remedio".
Lo cierto es que el director general de La Caixa, enfrenta(lo a muchos representantes de otras entidades por la batalla por la expansión, declinó el ofrecimiento aunque se mostró partidario de reforzar la CECA apuntando la oportunidad de nombrar vicepresidente de la confederación a Mateo Ruiz Oriol, director general de Cajamadrid.
Nuevos problemas
Desde que el pasado 23 de junio se inició la asamblea general ordinaria de la CECA se han producido diversos hechos relacionados todos ellos con el propio Sancho Dronda, con la CECA o las cajas de ahorro que no dejan de ser significativos y sorprendente su coincidencia. Sancho Dronda anunció en la asamblea, como lo había venido haciendo en las últimas, que dejaría su puesto de presidente de la Confederación por imperativos legales.Pero su sustitución no era obligatoria hasta que no se completara la renovación en todas y cada una de las cajas que forman parte de la CECA y 4ue, posteriormente, constituirían una nueva CECA. A primeros del actual mes de julio los máximos responsables de la CAZAR elegían un nuevo director general, cesando en su puesto Sancho Dronda por motivos de edad.
Dos días después, el 7 de julio, se conocía que el Ministerio de Economía, a propuesta del Banco de España, imponía una multa a la CAZAR de 15 millones de pesetas al tiempo que apercibía a la entidad, como consecuencia del expediente iniciado en marzo de 1985 para depurar responsabilidades sobre un agujero provocado en la caja de ahorros por créditos por valor de 1.000 millones de pesetas concedidos a una empresa dirigida por el yerno de Sancho Dronda.
Tres días despúes, el 10 de julio, se conocía la sentencia de la Audiencia Territorial de Madrid en la que se reconoce a las minorías políticas municipales a participar en los órganos de gobierno de las cajas de ahorro por lo que, de nuevo, quedaba paralizada la renovación en Cajamadrid pero sienta un precedente para el resto de las cajas.
Los enfrentamientos internos en la confederación saltaron de nuevo con motivo de la celebración de la última asamblea aunque en las conclusiones se eludió mencionar el problema de la expansión de las cajas. Los problemas surgieron algunas semanas antes cuando La Caixa y Cajamadrid, juntas, ofrecieron quedarse con la Caja Rural de Palencia a cambio de cerrar algunas oficinas y abrir otras en distintas localidades.
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