Al paro

Hacienda mandará al paro al pequeño comerciante de alimentación. Aunque parezca mentira, así es, pues yo le preguntaría al señor ministro de Hacienda cómo en dicha declaración se exigen unos beneficios netos del 23,56% (544.566 por volumen de ventas dividido por 2.311.200), y sin tener derecho a deducir los gastos del negocio y ni siquiera los correspondientes a la Seguridad Social, en los casos de autónomos, que, por sus escasos ingresos, no pueden tener ni un solo empleado.La reforma económica que hizo el señor Ordóñez tuvo en cuenta que el comercio al por menor había que seleccionarlo creando tres grupos.

Al grupo primero, o sea alimentación, se le reconocería para efectos de declaración un beneficio bruto de un 15%, que a la vez Hacienda reconocería un 6%, de beneficios netos para efectos de pagos.

La diferencia está fuera de todo cálculo, y como resultado será el cierre de muchísimos pequeños comercios que lo único que sacan es un salario mínimo, pero que con el actual 23,56% neto que exige Hacienda les será imposible poderlo obtener.

Llamo su atención para que analicen y comprueben la veracidad de estos datos, en los cuales no se ha tenido en cuenta la situación real del pequeño comercio, sin poder económico y sufriendo toda la competencia desleal de las grandes empresas, que sacrifican los intereses de productos básicos para llevar la gran masa de público a sus grandes almacenes.-