La selección española se juega ante la RFA el estar entre las cuatro primeras de Europa

La selección española de baloncesto se enfrente hoy a la de la República Federal Alemana (20.30, por TVE-2) en cuartos de final del Campeonato de Europa, que se celebra en Atenas. En juego está la clasificación para las semifinales y, por tanto, la posibilidad de estar entre los cuatro primeros equipos de Europa, objetivo mínimo que se considera debe cumplir a la vista de su calidad. Pero España, que había alcanzado posiciones de privilegio en toda suerte de estadísticas hasta terminar su gran partido ante Grecia, ha caído a lugares mediocres tras sus derrotas ante Yugoslavia y la URSS.

El juego español no parece suficientemente consolidado en este campeonato. Los técnicos apuntan a que, quizás, el seleccionador Díaz Miguel haya preferido reservar cosas para la fase final, que comienza hoy, donde todos los partidos son decisivos. Lo que sí extraña es que uno de los puntos negros del equipo sean los tiros de tres puntos, pues tiene cuatro especialistas que han usado este lanzamiento con gran acierto en la Liga española.Así destaca el pobre porcentajes de un jugador como Sibilio, quien ante la URSS tocó fondo con un 29% de acierto en los triples (5 de 17) lanzados, cuando en la Liga española se había convertido en el único jugador que superó los 100 triples y con un porcentaje próximo al 50%.

Otro detalle negativo, y que puede resultar más decisivo de lo que parece, es el del alto número de tiros libres que falla la selección, 47 hasta el momento, que le sitúan en un puesto bajo, el octavo de todos los participantes en el Europeo, con un 70,6% de acierto. La mejor selección en este aspecto es, precisamente, la RFA, con un 78,8%.

Romay, el mejor

Y en el aspecto individual también ha habido sorpresas, porque el jugador con más minutos de juego resulta ser Fernando Romay, sin duda en el mejor momento de su carrera deportiva, y jugador además que sólo ha sido eliminado en un encuentro, ante Rumania, de guante blanco. Romay no sólo es el segundo reboteador del campeonato, con 58 rebotes tras el alemán occidental Welp con 65. Es también el décimo jugador en número de minutos en cancha, con 2.49.03 horas de juego, lo que hace una media de 33.49 minutos por partido.

Y Romay acusa esta situación con humildad. "¿Momento dulce, no, Romay?", le han preguntado varias veces. "Bueno estoy ahí", contesta. Romay ha sido un caso de constancia fuera de lo común. Frente a una legión de incrédulos proclamó que Fernando Martín le restaba posibilidades de jugar, que él podía rendir de forma bien distinta con más minutos en cancha, sin salir como sustituto.

Sólo una persona, Díaz Miguel, apoyó las manifestaciones de Romay. Pero el resto del mundo no le creyó demasiado, Y ahora, tras un año sin Fernando Martín a su lado, Romay se ha convertido en un gran reboteador del Real Madrid y en un hombre decisivo en la selección. Por tanto, está siendo proclamado como el mejor pívot defensivo de Europa en estos momentos. Romay tiene todas las trazas de un intimidador, con sus 37 rebotes defensivos y sus 11 tapones.

A pesar de la precaución inicial que existía antes del comienzo del campeonato sobre la capacidad reboteadora española en su conjunto, de los partidos disputados en la primera fase se desprende lo contrario. España ocupa la segunda posición del torneo, con 301 rebotes, tras la URSS, con 328. De la selección se comentaba también su capacidad defensiva, mejor amoldada este año a la idiosincrasia de sus jugadores, y resulta que, estadísticamente, ocupa el décimo lugar en el aspecto defensivo, con 255 puntos encajados.

De la selección no se dudaba que disponía de jugadores con brillantez ofensiva y ese sí es un dato que concuerda con la estadística, porque España tiene el segundo mejor ataque. La selección tiene un porcentaje alto en tiro de dos puntos, el mejor con 61,9%, pero uno de los peores en tres puntos, 34,5%, siendo una de las selecciones que más ha tirado desde la línea de 6,25 metros.

El rival

Y en esta situación, España juega hoy ante la RFA, donde precisamente Romay se medirá con We1p. Si el equipo alemán destaca por algo es por su estatura y, si también destaca por otra cosa, es por su juego lento y por su dificultad para cambiar de ritmo. Individualmente, están destacando tres jugadores: Welp en los rebotes, el alero Jaeckel en la lista de anotadores (139 tantos, quinto lugar, 27 puntos por partido) y el base Koch en los triples (13, 2,6 por partido). El pívot Behnke, con sus 2,21 metros, ha sido un jugador muy utilizado.

En la primera fase, la RFA ha ganado por 90-86 a Polonia, 112-107 a Israel y 76-75 a Holanda, y perdido 72-95 con Checoslovaquia y 78-84 con Italia.

El resto de encuentros de cuartos de final son, hoy, Unión Soviética-Checoslovaquia, y mañana, Italia-Grecia y Polonia-Yugoslavia.