El abogado Argote denuncia a la juez Huerta por citarle a declarar

Jorge Argote, asesor del Ministerio de Interior y defensor de la Guardia Civil, ha presentado una denuncia ante el Juzgado de Guardia de Bilbao y ante el Consejo General del Poder Judicial por presuntos retrasos en la tramitación de diligencias relacionadas con el caso Linaza.

El letrado, que fue citado por la juez Elisabeth Huerta para declarar, hace ya 20 días, quiso que constara que su declaración fuera considerada como una denuncia. "Se ha puesto en cuestión mi ética profesional", declaró ayer a este periódico, "ya que se me citó como acusado en un expediente disciplinario, y no estoy dispuesto a que ahora quede todo en agua de borrajas".

Tras la publicación, en EL PAÍS del pasado 7 de mayo, de varias providencias dictadas por la juez Elisabeth Huerta relacionadas con la investigación sobre los presuntos malos tratos que sufrió Tomás Linaza durante su detención en mayo de 1981, la magistrada ha llamado a declarar a los abogados que, por ambas partes, han intervenido en el caso.

Jorge Argote, que insinúa que la filtración de la mencionada publicación podría proceder del mismo juzgado, pidió que su declaración fuera considerada como una denuncia a todos los efectos. "Han transcurrido ya 20 días, y continúo sin tener noticia de que se haya tramitado mi denuncia. Y quiero aclarar todos los extremos de un caso del que se ha abierto expediente disciplinario con motivo a publicación de unas providencias que, al parecer, en un principio fueron consideradas secretas".

Diligencias de oficio

La magistrada Elisabeth Huerta, titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Bilbao, inició unas diligencias de oficio tras conocer las circunstancias que pudieron influir en la incomparecencia de 90 guardias civiles, en el mes de septiembre del pasado año, a una citación judicial. Aunque la Dirección General de la Guardia Civil comunicó en un principio que los agentes no acudirían, la magistrada volvió a citarles, y finalmente se presentaron para proceder a las correspondientes ruedas de reconocimiento.

Tomás Linaza, padre del presunto etarra Tomás Linaza, ha reconocido ya a tres guardias civiles entre más de 200 que se han presentado en los juzgados. Los abogados que ejercen la acusación particular anunciaron en su día que continuarían reciamando ruedas de identificación hasta que el denunciante reconociera a los cinco miembros de la Guardia Civil que participaron en los interrogatorios que le practicaron hace ya seis años.