Las disputas socialistas pueden cambiar el panorama regional y municipal

Aragón es la comunidad autónoma donde los socialistas parecen tener peores perspectivas respecto a los resultados que obtuvieron en 1983. Entonces lograron la mayoría absoluta, con 34 escaños de los 66 en disputa. En esta ocasión las previsiones les atribuyen entre 18 y 19 escaños, lo que, de confirmarse, supondría una pérdida de casi el 50%.Sin duda alguna, la disputa interna en el seno socialista, que se ha materializado con especial acritud en el Ayuntamiento de Zaragoza, tendrá consecuencias muy negativas entre los votantes del PSOE. Si a esto se suma que el CDS ya apuntó en las generales de 1986 una seria implantación de voto en esta comunidad, puede explicarse que el sondeo le atribuya al partido que lidera Suárez siete escaños en el Parlamento aragonés, frente al solitario que mantenía desde 1983.

Alianza Popular, por su parte, desciende de los 17 escaños actuales a 14, mientras que los comunistas se recuperan y pasan de uno a dos diputados. La gran eclosión se produce, según el sondeo, en torno al Partido Aragonés Regionalista (PAR), que lídera Hipólito Gómez de las Roces, y que de contar con 13 escaños en el Parlamento autónomo pasaría a doblarlos, con 25 o 26. Si estos resultados se cumplen podría darse por seguro que los socialistas perderían el Gobierno de Aragón, toda vez que el PAR y AP tendrían escaños sobrados para sumar una holgada mayoría.

En cuanto al Ayuntamiento de la capital, la situación es muy parecida. De los 18 concejales que obtuvo el PSOE en 1983 pasarían ahora a 11 o 12. Alianza Popular corre aún peor suerte según el sondeo, y sus ocho ediles se verían reducidos a la mitad, mientras que el CDS, que no tenía representación en el Ayuntamiento de Zaragoza, contaría a partir del día 10 con seis concejales, y el PAR ascendería desde los cuatro actuales a ocho o nueve. El conjunto dibuja, por tanto, un severo correctivo al PSOE en el conjunto aragonés.