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Cambio de orientación sobre la marcha

La presencia de órdenes compradoras ha impedido que las realizaciones de beneficios pudieran imponerse en esta última jornada, sorprendiendo en esta ocasión incluso al propio mercado. El ambiente comprador de los corros eléctricos, ayer con algo más de papel, contrastaba con el proceso realizador que se estaba iniciando en los sectores industriales, respondiendo ambas situaciones a las expectativas del cierre anterior en el que la falta de una demanda abierta empezaba a dejar el terreno libre al papel.Pero esta situación ha sido aprovechada para tomar títulos a unos precios más baratos, pues el predominio vendedor estaba inclinando los precios a la baja. Han sido numerosos los valores que han atravesado por diferentes alternativas a lo largo de los diez minutos del corro lo que le ha dado a la sesión un interés adicional.

Los mercados de valores parecen haber asimilado completamente el nivel del precio del dinero y han decidido recomponer la figura y primar la posible baja en lugar de amedrentarse por unos tipos de interés elevados. La situación del mercado se convierte de esta forma en una simple cuestión de perspectiva: el dinero está muy caro, pero por eso mismo tiene más probabilidad de bajar que de subir.

Un sector eléctrico en el que el dinero continúa presionando al alza sólo consiguió en esta ocasión dos subidas al límite, ante la mayor presencia de partidas vendedoras, lo que era un claro síntoma de que el mercado bursátil estaba dispuesto a tomar beneficios.

Pero el cambio de orientación de algunos valores industriales empezó a dibujar alguna que otra sombra de duda en el rostro de los vendedores. Los resultados del sector bancario terminaron de convencer a aquellos que habían vendido de que la lógica del mercado estaba cambiando de argumentos.

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