A disposición judicial dos mujeres, acusadas de 83 atracos a personas de su sexo
Dos mujeres, R. C. R., conocida como La Charo, de 23 años, y J. G. M., de 19, se encuentran a disposición judicial en calidad de presuntas responsables de 83 robos con intimidación a personas de su mismo sexo, según informaciones policiales. La casi totalidad de los delitos ocurrieron en Ventas, Chamartín y Buenavista. Las detenidas fueron reconocidas por 83 denunciantes, que también identificaron las alhajas robadas.
A primeros de abril comenzaron a llegar denuncias a las comisarías. Las víctimas siempre decían lo mismo: habían sido atracadas por dos mujeres jóvenes, de unos 20 años, armadas con navajas o machetes. Las atracadoras eran morenas, de pelo largo, delgadas y vestidas con pantalones vaqueros. Una de ellas tenía dos letras tatuadas en un brazo; y la otra, un punto del mismo tipo en la frente, sobre el entrecejo, y un incisivo roto.Acostumbraban a seguir a la persona elegida hasta un lugar apropiado. Mientras una de ellas inmovilizaba a la víctima con un arma blanca al cuello, la otra le arrebataba el dinero y objetos de valor.
En algún caso, la víctima presintió lo que iba a suceder y se metió en un portal. Sin embargo, las atracadoras esperaron su salida. Según la policía, las acusadas demostraron una actitud violenta, hasta el punto de provocar lesiones a tres personas; a otra más, en avanzado estado de gestación, le pusieron el cuchillo en el abdomen.
La diversidad de horas y lugares en que actuaba la pareja dificultaba la detención. Las investigaciones se centraron en el distrito de San Blas, ya que, según algunos testigos, las asaltantes escapaban a veces en coches robados, que más tarde aparecían en ese barrio. De ahí se llegó a sospechar de una joven, conocida como Charo, con antecedentes por tráfico de drogas.
En la vivienda de La Charo, calle Arcos de Jalón, la propietaria se reunió con otra mujer y un hombre. Los tres se dirigieron a la Cruz de los Caídos, donde el hombre abrió un coche con una navaja. Sin embargo, observó la presencia policial y huyó, mientras que las dos mujeres fueron detenidas. El valor de los objetos robados, que han sido incautados en domicilios donde también se traficaba con heroína y en dos casas de compraventa, supera los seis millones de pesetas.