Botha rechaza la propagación de las 'áreas grises'

El régimen de Suráfrica no tiene intención de modificar el controvertido estatuto de zonas de grupo, ni de aceptar la existencia de áreas grises, en las que convivan blancos con personas de otras razas. El presidente, Pieter Botha, en la apertura de su campaña para las próximas elecciones legislativas sólo para blancos del 6 de mayo próximo, reiteró que las comunidades de cada color deben tener sus propias áreas de residencia.

La campaña se vio alterada en la madrugada del domingo con el suicidio del ministro de Medio Ambiente y Turismo, John Wiley, de 60 años, cuyo cuerpo fue encontrado en su cama con un tiro en la cabeza y una pistola en la mano. Un portavoz policial dijo que se trata claramente de un suicidio y descartó la hipótesis de un homicidio.En una conferencia pronunciada el pasado fin de semana en el Transvaal oriental, Botha criticó las afirmaciones hechas por miembros de su Gabinete y por algunos altos funcionarios, que habían anunciado que algunas áreas grises, -lugares en los cuales viven habitantes de varias razas- pueden aceptarse cuando hagan falta viviendas.

Sin embargo, Botha declaró: "No sé qué significan las áreas grises", y añadió que "la gente rica compra su propio apartheid, viviendo en grandes residencias y haciendas, pero el hombre [blanco] común tiene que vivir donde pueda". Con sus declaraciones, Botha parece haber destruido toda esperanza de que los negros sean formalmente autorizados a vivir en las áreas reservadas para blancos.

[La explosión de una mina el pasado sábado bajo un vehículo en un camino rural en el noreste de Suráfrica causó cuatro muertos y un herido, según la policía surafricana, que responsabilizó al ilegal Congreso Nacional Africano (ANC). Los muertos son dos hombres y dos mujeres, según France Press.]