_
_
_
_
Crítica:CINE / 'EL DELATOR'
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Bobo bonachón

Por El delator (The informer, 1934) ganó su director, John Ford, un oscar, y su actor principal, Victor McLaglen, otro, amén de los también concedidos a Dudley Nichols por el mejor guión adaptado y a Max Steiner por una magnífica banda sonora que no nos extrañaría nada hubiera desaparecido esta noche por algún duendecillo del laboratorio. La película fue un exitazo, a pesar de que los directivos de la productora, la RKO, no confiaban en ella y se la concedieron a John Ford porque su presupuesto era barato: 200.000 dólares costó.Cierta aura mítica envuelve este prestigioso producto, todo y que a cada nueva revisión uno se da cuenta de que no es la obra maestra que acostumbra a inundar la filmografía de Ford. Es, eso sí, un filme estimable, entre otras cosas por la sinceridad y el aplomo con que está realizado, a corazón abierto. Su tema puramente irlandés y su protagonista principal, un bobo bonachón -que, precisamente por eso, por ser bobo y por ser bonachón, causa un mal humano-, son membranas que a Ford le pertenecían por derecho propio y por raíces, y a ellas se entregó poniendo toda su humanidad, que no era poca. Y la religión, como fuente redentora de todo mal, es otro aspecto que, se esté de acuerdo o no con él, dignifica la obra y aporta luz al conocimiento de un país anclado en mil y un pasados. Mirando hacia atrás sin IRA.

El delator se emite hoy, a las 21

00 horas, por TVE-2.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_