España y Polonia desean que el impulso de sus relaciones sirva a la distensión
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Los ministros de Asuntos Exteriores de España y Polonia, Francisco Fernández Ordoñez y Marian Orzechowski, respectivamente, expresaron ayer su deseo de que el incremento de las relaciones entre los dos países contribuya a la distensión y el diálogo entre el Este y el Oeste europeo. Durante su visita oficial a Varsovia, iniciada ayer, Fernández Ordoñez pidió un "esfuerzo por ambas partes" para alimentar el nivel de los contactos e intercambios entre España y Polonia. Marian Orzechowski, por su parte, subrayó que la visita del ministro español supone el "inicio de una nueva etapa en nuestro diálogo político".El viaje de Fernández Ordoñez a Polonia tiene como objeto la renormalización de las relaciones entre los dos países, que acaban de cumplir diez años desde su establecimiento en 1977, pero que estuvieron en la práctica congeladas tras el golpe del general Wojciech Jaruzelski en diciembre de 1981.
El nuevo clima político y la apertura de Jaruzelski podrá comprobarlo hoy personalmente el ministro español en varios contactos extraoficiales previstas con representantes sociales, religiosos y políticos polacos. A mediodía Fernández Ordoñez ofrecerá un almuerzo en la embajada española a un grupo de intelectuales. Luego tiene previsto un encuentro con el secretario de la conferencia episcopal polaca, el obispo auxiliar de Varsovia Bronislaw Dabrowski.
Posteriormente Fernández Ordoñez se entrevistará con cuatro representantes del ilegal sindicato Solidaridad, entre los que figura uno de sus máximos dirigentes, Zibigniew Bujak, que dirigió Solidaridad desde 1981, hasta su detención en la primavera de 1986. Bujak fue amnistiado el pasado septiembre y actualmente es, junto a Lech Walesa, uno de los máximos dirigentes del movimiento.
Con esta información de primera mano sobre la realidad política de Polonia, Fernández Ordoñez se entrevistará mañana con el general Jaruzelski.
