Debate con Solchaga

En el programa Debate, de TVE, del pasado 19 de febrero, el señor Solchaga expuso sus tesis, o, mejor dicho, las del Gobierno de la nación. Yo creo haberlas entendido; sin embargo, me quedaron algunas dudas. Por ejemplo: ¿cuando se habla de mejorar la economía, se incluye también a los trabajadores o sólo a las empresas? Es bueno que las empresas tengan beneficios, cierto, pero ¿no lo es tanto. que los tengan los trabajadores? En contra de los datos sindicales, se afirma que los salarios reales crecieron por encima de la inflación, como demuestra el hecho de que la demanda interna creció, y se citan automóviles y electrodomésticos de línea blanca. ¿No cree el señor ministro que esto pueda ser debido a que alguna vez hay que sustituir por necesidad estos aparatos porque ya son muy viejos y están averiados o inservibles, después de más de 10 años de crisis económica en que no se pudo hacer por puro lujo? ¿Los deslizamientos salariales no deben estar previstos en los costes de las empresas, o es que también tienen que ir a cargo de la subida salarial de los trabajadores y no a cargo de los beneficios de las empresas, que nadie parece negar que han existido y aumentado en los últimos años? ¿Existe alguna obligatoriedad o control de las empresas de mejorar la calidad de sus productos o, simplemente, de la propia gestión económica? ¿Se exige al empresario alguna oposición para demostrar su capacidad, como se le exige al trabajador (cada vez a más alto nivel)? Se exige más productividad al trabajador, pero ¿quién controla la productividad del empresario? Hay que competir con los demás países de Europa, de acuerdo, pero ¿cuándo les vamos a vender más que ellos a nosotros? Si esto es un peligro para nuestro empleo interno, ¿por qué hemos entrado en la CEE?Dice el señor ministro que si los salarios suben por encima del 5%, la inflación aumentará en la misma proporción. Dice el señor ministro que la presión fiscal sobre los beneficios empresariales creció un 27%. Si el Estado considera lícito tan suculento bocado sobre los excedentes empresariales, ¿por qué el Gobierno no ve lícito un humilde bocadito de dos o tres puntos por encima de la inflación prevista para las rentas salariales? ¿Es que la presión fiscal no genera inflación?-