Ángel Sanchis
Debo rectificar la atribución que se me hace en EL PAÍS del pasado domingo de ser "asesor jurídico" de mi buen amigo Ángel Sanchis; lo podría ser con dificultad, dado que ninguno de mis dos títulos universitarios es el de licenciado en derecho.Querría añadir además que el amplio informe firmado el domingo 15 de febrero por Carlos Yárnoz tiene mucho más de rocambolesco que de real. Ajeno como estoy al actual comité ejecutivo de Alianza Popular, puedo, sin embargo, dar testimonio de que todos los afiliados hemos acogido con esperanza la victoria democrática de Antonio Hernández Mancha y de su equipo en nuestro VIII Congreso. Nadie que esté en sus cabales desea que se den el tortazo, sino que tengan un gran éxito, al que deseamos contribuir. Y ello, entre otras razones más generosas, por la muy clara de que siempre sería nuestro tortazo o nuestro éxito.
Por lo demás, espero que ahora detecten a cualquier filtrador y le apliquen el drástico tratamiento que el congreso aplaudió cuando fue propuesto en sus discursos por los señores Herrero y Hernández Mancha, aunque ello moleste a los beneficiarlos de las filtraciones.-