_
_
_
_

El Gobierno responde a Shultz que la postura sobre las bases la conoce Washington desde julio de 1986

El Gobierno español insistió ayer que la propuesta sobre la reducción de la presencia militar norteamericana fue entregada por escrito, "formal y detalladamente", el 10 de julio del año pasado. Esta afirmación desmentía al secretario de Estado norteamericano, George Shultz, que declaró el miércoles ante un subcomité del Congreso de Estados Unidos que las negociaciones "van muy mal" y que los españoles "no están del todo seguros del total de militares norteamericanos que quieren en su suelo". Fuentes oficiales insistieron en que el punto conflictivo de las negociaciones con EE UU es "la salida de los 79 cazahombarderos F-16 estacionados en Torrejón y los aviones cisterna de Zaragoza".

Más información
El Departamento de Estado, preocupado por la ayuda exterior

Las mismas fuentes añadieron que en el tema de la reducción de las bases "no estamos negociando dinero, sino que es un compromiso político adquirido con el pueblo español en el referéndum sobre la OTAN". "Aun en el supuesto de que la ayuda no se hubiera reducido, o incluso aunque hubiera aumentado el año pasado, la posición española de exigir el desmantelamiento de Torrejón y la salida de los aviones cisterna de Zaragoza sería la misma", dijeron."Las propuestas españolas sobre la reducción de la presencia militar estadounidense en España fueron entregadas por escrito y de manera formal a la parte norteamericana en la primera ronda negociadora, que tuvo lugar el 10 de julio del pasado año en Madrid", dijo el director general de la Oficina de Información Diplomática, Inocencio Arias, quien reiteró la posición de firmeza española en las negociaciones y el rechazo de la propuesta hecha por Washington la pasada semana en la última ronda negociadora.

En respuesta a la alusión de Shultz cuando dijo que los españoles no saben el total de militares estadounidenses que quieren reducir, fuentes oficiales dijeron que los norteamericanos saben perfectamente cuál es "el punto clave e innegociable" de la posición española. "No decimos el porcentaje de personal porque eso es secundario; hablamos de las instalaciones y equipos. El punto básico es la salida de España de los aviones; de ahí saldrá el número de personas que tengan que irse", añadieron.

La clave de la posición del Gobierno es la exigencia de que Estados Unidos traslade de territorio español el ala táctica 401, estacionada en Torrejón de Ardoz, compuesta por 79 cazabombarderos F-16, así como el traslado de los aviones cisterna que tienen en la base de Zaragoza. Los norteamericanos se oponen a esa reducción argumentando que ello supondría un grave debilitamiento del flanco sur de la defensa occidental, y, en cualquier caso, aceptarían la salida de sus aviones de Torrejón siempre y cuando sus misiones y niveles de eficacia fueran sustituidos punto por punto por las Fuerzas Armadas españolas, algo que ni los españoles aceptan ni los norteamericanos creen técnicamente posible.

Estados Unidos mantiene en España tres bases aéreas (Torrejón, Zaragoza y Morón), una naval (Rota) y una decena de estaciones de comunicaciones, suministros y apoyo repartidas por todo el territorio nacional. España ha reiterado que las negociaciones sobre la reducción de la presencia militar norteamericana -una promesa contenida en la pregunta del referéndum sobre la permanencia de España en la OTAN, celebrado el 12 de marzo de 1986es una condición previa para la renovación del convenio, y que en caso de que no haya acuerdo en esta fase de las negociaciones sobre la reducción de las bases, denunciará aquel convenio.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Compromiso político

Fuentes diplomáticas españolas añadieron ayer que la posición española sobre la reducción de las bases, además de ser explicitada por escrito a los negociadores norteamericanos, ha sido expuesta verbalmente al secretario de Estado, Shultz tanto por el presidente del Gobierno, Felipe González, en septiembre de 1985 en Nueva York, como, más recientemente, por el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordófiez, durante una entrevista entre ambos en Bruselas, donde coincidieron durante una reunión del Consejo Atlántico.

El secretario de Estado norteamericano, en su intervención ante el Comité de Asignaciones Presupuestarias de la Cámara de Representantes, hizo una decidida defensa de la necesidad de mantener la ayuda exterior, y responsabilizó en parte a la reducción de la ayuda a España de las dificultades en que se encuentran las negociaciones para la reducción de la presencia militar de EE UU en España. Shultz dijo que las bases en España "son muy importantes para nosotros", y añadió que resultaría "mucho más caro" si tuvieran que trasladarlas a otro país.

Fuentes diplomáticas españolas quitaron hierro a las afirmaciones de Shultz, señalando el contexto en que fueron hechas: la defensa del jefe de la diplomacia norteamericana del mantenimiento de los niveles actuales de la ayuda exterior de Washington, que la Administración de Ronald Reagan está reduciendo dramáticamente en las asignaciones presupuestarias.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_