La CEPYME cedería dos puntos de incremento salarial a cambio de una menor conflictividad

Los pequeños y medianos empresarios estarían dispuestos a ceder dos puntos por encima del 5% de incremento salarial recomendado por el Gobierno y la propia CEOE para este año, a cambio de que no se desate la conflictividad laboral. Así lo afirmó el presidente de la CEPYME, Angel Panero, en conferencia de prensa previa a la celebración de la asamblea anual de la confederación de la pequeña y mediana empresa, integrada en CEOE.

El presidente de la CEPYME advirtió que si los salarios suben este año más que la inflación prevista no es responsabilidad de las pymes "sino de aquellos que con su actitud han hecho imposible la firma del pacto social".

Volvió a recordar el compromiso entre CEOE, el Gobierno y UGT en noviembre pasado de que con un objetivo de inflación del 5%, los salarios deberían crecer en esta medida y atribuyó a UGT la responsabilidad de que no se haya logrado la concertación al no reconocer este pacto.

Angel Panero dijo que las empresas englobadas en la CEPYME -unas 480.000, según su presidente- afrontan la negociación colectiva "con resignación" al no existir un pacto protector". A pesar de que su organización acepta el objetivo del 5%, Panero señaló que existe un peligro real de que los salarios crezcan más de lo recomendado por Solchaga, lo cual sería muy negativo en unos momentos en que "nos planteamos competir con las empresas europeas".

El orden de prioridades para las pequeñas y medianas empresas, en cuanto a las medidas, que son necesarias adoptar para afrontar esta situación, son la flexibilidad laboral, la rebaja de las cuotas empresariales a la Seguridad Social y los incrementos salariales, mientras que para las grandes empresas, es exactamente al contrario.

Empresarios sumergidos

Pidió al Gobierno que se deje de hacer demagogia y de vertir opiniones gratuítas respecto a la homologación de nuestra legislación laboral a la de los restantes países europeos. "Me conformo", dijo, "con que se encargue a un grupo de técnicos un estudio sobre este tema y que dictamine lo que crea más conveniente".Angel Panero dijo, además, que la situación en que se tienen que desenvolver las empresas en España está haciendo imposible la actividad dentro de la legalidad. "Prefiero", afirmó, "un empresario sumergido a un empresario hundido". Reconoció que el año pasado ha habido una menor destrucción de empresas, pero señaló que muchas de ellas más que desaparecer intentarán agarrarse a la economía sumergida.