Cómoda victoria del Estudiantes
La única disputa que existió en la cancha del Magariños fue la que ejercieron las hinchadas de ambos equipos. A la Demencia le surgió la competencia en el pequeño grupo de seguidores canarios asistentes al encuentro. Sólo esta circunstancia y los continuos errores de los árbitros animaron un partido deslucido, que ganó cómodamente el Estudiantes. Porque pitar 66 faltas personales en un encuentro no es habitual. Como consecuencia de ello, hasta 7 jugadores se vieron eliminados (tres del Estudiantes y cuatro del Cajacanarias). Pero la peor enseñanza entresacada de tanta personal es la falta de un criterio para aplicar con justicia el reglamento. Porque abusar de la compensación como única medida resolutoria es incongruente con el mismo principio del arbitraje.
El Estudiantes se impuso desde el comienzo en el marcador y no dejó que en ningún momento el equipo canario le sorprendiese. Sólo existió cierta incertidumbre cuando el Cajacanarías se acercó a 6 puntos a falta de cinco minutos y con tiempo suficiente para tratar de remontarlos. Pero sólo fue un espejismo, pues el Estudiantes aprovechó los fallos en !os lanzamientos canarios para lograr la diferencia final.
El entrenador del Cajacanarias, Hernández Rizo, planteó de salida una zona para tratar de frenar la rapidez y golpear la supuesta debilidad en los lanzamientos de los jugadores estudiantiles.
Sin embargo, el planteamiento no resultó práctico. Los estudiantiles, bien dirigidos por Gil, crearon situaciones favorables de lanzamiento. Ante este hecho y el que Philips, muy bien marcado por Pinone, no estuviera afortunado (sólo 9 puntos), el técnico canario buscó con continuos cambios, sin conseguirlo, el equipo más adecuado.
El más práctico en su trabajo fue Harper, que logró cargar de personales a sus marcadores (Rodríguez y Rementería) y una capacidad anodadora nada desdeñable. Su buen juego en el ataque coincidió con la dirección de Cabrera. Éste manejó con habilidad a su equipo y le permitió reducir deferencias. Pero no dio sensación en ningún instante de poder superar a los estudiantiles. Parece realizado con el buen papel hecho hasta el momento.
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