_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Emergente

Que los filósofos de guardia sigan dando vueltas nostálgicas en sus mesas redondas a las diferencias entre aquella época de las utopías, las vanguardias, las mayúsculas y la boina del Che, y entre estos tiempos en pos menor que rechazan cualquier teoría de cátedra; lo único que sé a ciencia cierta es que antes le colocábamos el sambenito de dominante a todo y el latiguillo de ahora es lo emergente. Discuten de un cambio de paradigma, pero yo sólo noto un cambio de pronunciación. Aquellos mismos que hace una década decían clase dominante, ideología dominante o política dominante, dicen con idéntíco entusiasmo clases emergentes, ideas emergentes, políticos emergentes. Hasta los peluqueros, las modistas y los pinchadiscos se han contagiado del sarampión y hablan de modas que emergen. Aquel sexo industrial era dominante y este sexy posindustrial es emergente. La cultura premoderna dominaba o era dominada; el look tardomoderno se limita a emerger o naufragar. Había ideologías imperantes y hay pragmatismos buceantes.Se domina desde arriba, pero se emerge desde abajo. Aquellas duras ideas dominantes emanaban del estado gaseoso y las dulces creencias emergentes brotan del estado líquido. Ahí está eldetalle delator. O sea, que hemos pasado del mundo estratosférico al mundo submarino. Del casco del cosmonauta a la escafandra del buzo. Hasta en las más viles metáforas del momento suenan ecos emergentes, aunque a la inversa. Tiempo de economía sumergida, de monedas flotantes, de trabajo inmerso, de dinero zambullido en la caja B, de teorías empantanadas. Por eso la filosofía se parece cada vez más a una rama verdosa de la anfibiología. Acaso porque el ideólogo y el líder adoptan la condición anfibia para sobrevivir en los pantanos de la complejidad. Todo es emergente, en fin, porque nos han acostumbrado a vivir como si siempre estuviéramos en caso de emergencia. El gran truco del poder ya no consiste en dominar con descaro, sino en acojonar con sutileza. Y el Estado de emergencia cria ranas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_