Protesta de los vecinos de San Fermín por el incendio intencionado de un aula-huerto
Una gran pancarta que decía "Nos han quemado el aula-huerto. ¿Por qué?" encabezó ayer la manifestación convocada por distintas entidades del barrio de San Fermín en protesta por el incendio intencionado de la caseta del aula-huerto La Semilla y por el destrozo de varias parcelas del huerto. La caseta, desde su construcción, ha permitido paliar parte de los problemas derivados de la falta de centros sociales en el barrio, por lo que ha servido para albergar desde un taller de carpintería hasta dos aulas de guardería, además de dar clases de agricultura a los escolares de la zona.
El huerto fue creado hace cuatro años, cuando un colectivo formado por diversas entidades ciudadanas decidió pedir al Ayuntamiento un terreno ocupado por un vertedero y situado entre el polideportivo San Fermín y el río Manzanares.Los 7.000 metros cuadrados de terreno se vieron pronto parcelados y sembrados. Luego se levantó un invernadero, y hace año y medio fue construida la caseta. "A falta de cines, discotecas y centros juveniles, la caseta ha sido utilizada para muy distintas actividades. Antes del incendio, el aula-huerto atendía a unos 300 niños y jóvenes", dice Jorge Caleya, perito agrícola y profesor de educación compensatoria.
El pasado jueves, un grupo de jóvenes de 16 y 17 años, tras destruir algunas parcelas sembradas forzaron las rejas de las ventanas del local y penetraron en la caseta. Allí, tras tirar al suelo el material escolar de una de las aulas de la guardería, apilaron algunos muebles en otra y los prendieron fuego, provocando la destrucción del aula.
Mientras se intenta que la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento ayuden a subsanar los desperfectos, los pequeños de tres y cuatro años que utilizaban la caseta como edificio auxiliar de la guardería del barrio han tenido que ser trasladados a ésta. "Estábamos pensando en pedir al Inem que organizara aquí un cursillo, y queríamos crear un aula de la naturaleza. Ahora todo ello ha quedado en el aire", dice Caleya.
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